La reunión entre el diputado de Vox Carlos Verdejo, el grupo parlamentario de Ceuta encabezado por Carlos Sergio Redondo y la responsable nacional de Acción de Gobierno del partido, Monserrat Lluis, se pospone. Será finalmente el martes 22 de abril en lugar del lunes 21, como estaba fijada. Las razones son de “operatividad” y de agenda de la propia Lluis para desplazarse a Ceuta, por lo que la cita se retrasa 24 horas.
El motivo de este encuentro es cerrar, o al menos intentarlo, la crisis abierta en el grupo parlamentario en la Asamblea de la ciudad y que enfrenta a Verdejo con Redondo. La primera consecuencia de este choque ha sido la salida de otra diputada de Vox, Teresa López, que forma parte ya del grupo de no adscritos.
Las fuentes consultadas por este periódico han precisado que no hay un orden del día establecido para esta reunión (al menos todavía) y que están por ver cuáles son las exigencias de la dirección nacional para reconducir la situación.
Reunificar el grupo parlamentario como objetivo
Lo que sí parece claro es que, aunque Lluis vetó la participación de López en el encuentro porque no pertenece de hecho al grupo, su nombre saldrá durante el mismo, ya que una de las peticiones de Verdejo será precisamente la "reunificación" del partido y que los cinco diputados vuelvan a formar a formar parte de la disciplina de Vox en la Asamblea.
Una de las opciones que se plantea en estos momentos es que la dirección nacional le exija a Verdejo la entrega de su acta de diputado, algo que a día de hoy no es una posibilidad con visos de realidad. De hecho, el propio Verdejo ha señalado en varias ocasiones que, aunque está dispuesto a negociar, no tiene en mente dejar su puesto.
Así las cosas, los escenarios que se barajan son que, por un lado, la cita con Montserrat Lluis sea fructífera y se restablezca la normalidad con la vuelta incluso de Teresa López al grupo, que en principio es la más complicada. De otro, que el desacuerdo sea total y que Verdejo acabe también en el grupo de no adscritos. Y la tercera vía sería la de un “alto el fuego” que dejen más o menos las cosas como están y que baje el tono de las críticas entre unos y otros.
Seguidismo al PP y explicaciones de las cuentas
¿Y cuál es el origen del enfrentamiento? Pues desde el entorno de Verdejo tienen claro que hay una estrategia por parte de Redondo que no comparten, como es su acercamiento al Partido Popular, entre otras cosas, mientras que el movimiento afín a Verdejo es más “anti PP” y contrario a Vivas. No aceptan hacer “seguidismo” a los populares, aunque sí estarían dispuestos a negociar con ellos “dejando las cosas claras”.
En el horizonte está también una intervención de Carlos Verdejo en una sesión plenaria en septiembre de 2024, en la que pidió a todos los grupos políticos que publiquen sus cuentas, algo que, según fuentes cercanas al diputado, “Redondo lo interpretó como algo personal” y es cuando empieza lo que el propio Verdejo ha calificado en ocasiones como “una persecución”. De hecho, fue suspendido cautelarmente para representar institucionalmente al partido, un expediente que a día de hoy continúa abierto.
Las reclamaciones de Verdejo
Monserrat Lluis, lugarteniente de Abascal en la dirección nacional de Vox, ya ha tenido que intervenir en varias crisis territoriales desde que ocupa el cargo, como en el Ayuntamiento de Valencia o en el Parlamento de Baleares, si bien el caso de Ceuta es “el más duro” de los que ha tenido hasta ahora, según el entorno de Verdejo, ya que consideran que el diputado díscolo con la dirección del grupo parlamentario está siendo fiel a los postulados de Abascal, mientras que la gestión de Redondo, opinan, “está llevando hacia abajo la marca Vox en Ceuta de una forma alarmante”.
Así las cosas, y a poco más de 48 horas de la reunión entre la dirección nacional de Vox, el grupo parlamentario en Ceuta y el propio Carlos Verdejo, lo que el diputado pretende poner sobre la mesa se resume en reconstituir el grupo parlamentario y que quede tal y como arrancó la legislatura con el retorno Teresa López, que expliquen las cuentas del partido en la Asamblea y que se aclare la política de contratación de asesores que Vox ha realizado durante los últimos años.






