El problema que tanto está sonando en redes sociales y medios de comunicación sobre el malinois que estaba en unas condiciones totalmente lamentables y los servicios de recogida de animales no recogieron de la barriada del Príncipe, y que finalmente ha muerto, aparte de las supuesta responsabilidad que pueda tener el 112, la empresa de recogida, etc., es también responsabilidad de políticos y altos cargos competentes en materia de bienestar animal por lo mal que lo están haciendo.
Todo este revuelo que está ocurriendo les da igual a los responsables y lo que pretenden es desviar la atención, pasándose la responsabilidad de unos a otros y que nos olvidemos de lo principal.
Aquí lo que verdaderamente está claro es que un perro ha muerto por la dejadez de todos los responsables en materia de protección animal que han vuelto a pasar de todo, porque en el fondo les da igual, el único interés que supuestamente los mueve es llevarse un pedazo de sueldo para sus casas y tener su buen cortijo político.
Lo del 112 es más de lo mismo.
¿Cuántas quejas públicas hay del 112 de este tipo de asuntos de animales abandonados y demás?
¿Cuántas quejas públicas hay de los servicios de recogidas de animales?
¿Cuántas quejas públicas hay de que el Ayuntamiento no cumple con su obligación inexcusable e ineludible con las leyes de bienestar animal?
La respuestas a todas estas preguntas, y más, nos las sabemos de memoria.
Ya va siendo hora de que el Ayuntamiento, con su presidente-alcalde a la cabeza, que ya lleva casi 30 años “gobernando”, se tomen en serio todo lo relacionado con el bienestar animal: abandono de animales, cría ilegal de perros que están de moda, animales sin vacunar, colonias de gatos desatendidas, gatos muriéndose de hambre porque el Ayuntamiento pasa del tema.
Otro tema del que el Ayuntamiento lleva años pasando es de hacer campañas serias y eficaces de esterilización de gatos que viven en la calle. Lo único que ha hecho hasta el día de hoy han sido autenticas chapuzas que no han servido de nada.
Bueno, para lo único que han servido esas campañas chapuzas, ha sido para añadirle más trabajo a los pocos voluntarios que quedan, los cuales han tenido que cargar con el peso de todas las campañas de Captura, Esterilización y Retorno del gato al mismo lugar donde se capturó, una vez esterilizado y pasado el tiempo de postoperatorio.
Y por si fuese poco, las campañas CER, el Ayuntamiento las para cada vez que le da la gana y deja sin efecto el trabajo que con tanto esfuerzo han hecho los voluntarios, porque en muy poco tiempo otra vez está toda Ceuta llena de crías de gatos.
No se entiende que los responsables políticos de este tema lleguen a ser tan ineptos que no se den cuenta que las campañas CER tienen que ser continuadas en el tiempo, que no se pueden parar a su antojo, que deben ser continuadas en el tiempo hasta que la población gatuna esté totalmente controlada.
¡A ver si os enteráis ya que parecéis…!