Hay políticos que no valen ni para escoger la ubicación de una residencia para personas mayores, pero bien que saben “ubicarse” ellos. Quiero pensar que su poca valía para ejercer de político es sin maldad, pero lo más seguro es que me equivoque y es que sean unos pasotas que van a lo que van y que no asumen como principal misión servir a los ciudadanos, y más concretamente en este caso al que me voy a referir a las personas mayores dependientes y a las no dependientes.
Alto y claro, la ubicación de la Residencia Gerón es una auténtica mierda. Otra cosa es la residencia y su personal, que de eso ya hablaremos otro día, solo decir que el personal es bueno y profesional, pero hay falta de personal, todo funcionaría mucho mejor con más personal, sobre toda para los residentes que son dependientes.
Da pena ver que hay residentes que, como consecuencia de la ubicación de la residencia, la cual está bastante alejada del centro de la ciudad y no dispone de una parada de autobuses cerca de la puerta, se las ven y se las desean para poder ir al centro de la ciudad, algunos es que ni van. Por si esto fuese poco hay que bajar un tramo de cuesta, el mismo que después hay que subir, el cual no es apto para personas mayores y mucho menos si se tienen que valer de muletas, bastón, sillas de ruedas...
Que una persona mayor que está viviendo en una residencia no pueda ir a ningún sitio como no sea llamando a un taxi es triste. A más de un alto cargo, por no decir a todos, se le tenía que caer la cara de vergüenza al suelo. El costear taxis todos los días para salir y volver a la residencia es imposible de asumir para la inmensa mayoría de residentes, pues una gran parte de su pensión la tienen que entregar para sufragar los gastos de la residencia. El inconveniente de la ubicación y el que no haya ni una sola tienda ni nada de nada en los alrededores de la residencia hace que para algún que otro residente le dé la impresión de estar tan aislados como en una cárcel o en un exilio obligatorio.
Menos mal que los mayores son personas con mucha educación, yo diría demasiada, y cuando aparece por la residencia cualquier político oportunista para hacerse la foto y quedar bien, incluido Juan Vivas, no los reciben con tomates en las manos (no para hacer una ensalada precisamente) y un fuerte abucheo.
Desde estas líneas decirle tanto al Delegado del Gobierno como al Presidente de Ceuta que solucionen a la mayor brevedad posible este problema y pongan una parada de autobús frente a la Residencia Gerón o lleguen a un acuerdo y subvencionen (paguen) las carreras de todos los taxis que cojan los residentes de Gerón, para así hacerles la vida algo más fácil. ¡Se lo merecen!
Por último, un dato curioso, a la macrocárcel si que llega un autobús hasta muy cerca de la puerta, de ello me alegro, también tienen derecho.