Doscientos años son difíciles de resumir. Francisco Carmona, jefe de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras en la Comisaría de Sevilla, ha viajado este martes en Ceuta al pasado de la Policía Nacional, un trayecto en el que ha hecho especial hincapié en el siglo XIX.
El policía ha impartido una conferencia que orbita en el nacimiento y conformación del cuerpo de seguridad, unos años que fueron fundamentales para su consolidación tal y como se conoce a día de hoy cuando celebra su bicentenario.
No fue un camino fácil. Estuvo marcado por los vaivenes de una España en constante cambio. Durante estos años, la Policía Nacional incluso tuvo que enfrentarse a grandes retos como lo son los cambios significativos políticos que se produjeron en el país o incluso la propia Guerra civil. Se trata, en palabras de Carmona, de un siglo de “inestabilidad” combinado con otros periodos de equilibrio. “Fue un siglo de fárrago, un siglo intenso de cambios en un corto plazo, donde los acontecimientos se producían en cascada”, ha resaltado.
El cuerpo de Policía Nacional se fraguó en España entre los entresijos de los cambios políticos y las guerras, entre ellas, las carlitas y la de la Independencia, que impulsó en aquel momento una codificación jurídica basada en la separación de poderes.
Uno de los acontecimientos clave para su configuración se dio en 1824. A través del conde de Ofalia y un superintendente se dio una etapa de estabilidad en la que idearon un proyecto para la estructura de la seguridad interior del Estado. Este fue el antecedente histórico de la Policía Nacional. Fue en ese año cuando el territorio nacional había pasado por una serie de transformaciones de la mano del liberalismo y las guerras de Napoleón.
Estas últimas, de hecho, fueron principales para la incorporación de un nuevo modelo para la Policía Nacional en la Sûreté Nationale, el cuerpo de seguridad vigente en Francia en aquel momento. “Es un modelo girondino en el que establecieron la separación de la justicia y de la policía. Napoleón lo arrastró con su ejército al resto de Europa con la llegada de su hermano José Bonaparte”. Esa organización policial tuvo un gran peso a la hora de la formación del actual cuerpo de seguridad.
La evolución del cuerpo de seguridad en el siglo XIX fue constante y se produjo de la mano de los cambios en las autoridades, así como en la propia sociedad. “Es un siglo de cambios constantes en la administración en la policía y en todas las instituciones del Estado”, ha destacado Carmona. La aceptación por parte de los liberales y carlistas del régimen monárquico de Isabel II tras la caída de la primera república, conllevó, en cierto modo, a que se fijara la seguridad interior de la España de aquel momento a través de la policía.
“Nos situamos en una sociedad donde el liberalismo y la revolución burguesa cambia todos los valores y la mentalidad. No tanto, al principio, en las clases bajas o en el pueblo, pero sí en las élites y clases medias. Esto influyó mucho para que se instaurase la policía y desapareciera la Inquisición”, ha precisado.
Continúan en Ceuta los actos programados dentro del bicentenario de la Policía Nacional. El Casino Militar de Ceuta ha sido este martes testigo de una larga historia lleno de desafíos, altibajos y, sobre todo, superación.