La comunidad musulmana está celebrando actualmente el mes sagrado, el Ramadán. Para ello, y por llevar mejor este mes, la Asociación del Talento y el Arte de Musulmanes en España ha realizado 29 capítulos dedicados a la reflexión sobre el Corán. En esta decimoctava entrega, que puede verla a través de FaroTV, habla Mansur Mota, licenciado en Ciencias Islámicas, Jurisprudencia y Teología por la Universidad de Chateau, Francia.
El capítulo de este miércoles está dirigido al “ser humano y la relación con el Sagrado Corán. Es una entidad que Allah creó para que fuesen dos personas. El Corán fue pionero en otorgar derechos para la mujer que antes no tenían, pero también se los dio a los animales y plantas”.
Mansur Mota señala que “pasaron muchos siglos hasta que algunas ideologías hablasen sobre los derechos que tienen todas las personas o seres vivos. El Islam dice que toda la creación del mundo es una potestad de Allah”
Seguidamente señala que “Allah enseñó que el ser humano es una entidad que no se puede transgredir en su espiritualidad, ética o moral. Cualquier persona que quiera agredir, insultar o difamar a cualquier criatura, Allah lo tendrá en cuenta”.
El shiej aclara en este sentido y pone un ejemplo. “Tenemos ‘hadices’ de cómo nos habla del día del Juicio en el que Allah nos tendrá en cuenta por las obras con otras personas pero también las obras con los animales. Allah cuando nos insta a sacrificar un animal para comerlo y siempre tenemos que decir ‘en el nombre de Allah’. Lo hacemos para alimentarnos y no por interés o para divertirnos”, dice.
El profeta Mohamed dijo que para sacrificar a un animal “hay que hacerlo rápido y sin dolor”.
Para concluir, Mota añade la importancia de que “los derechos que Allah otorgó a la mujer en el Islam, son muchos y pioneros, anticipándose a otras ideologías. Nos enseñó que la mujer es la otra esencia que compone el ser humano. Las dos esencias (hombre y mujer) se necesitan y complementan. La mujer es igual que el hombre en espiritualidad, ética y moral, y no puede ser tratada de forma indiferente”.
“Allah tiene en cuenta que son entidades iguales en espiritualidad, pero tienen cualidades distintivas no diferentes. La mujer tiene cosas que no tiene el hombre, y viceversa, pero eso no quiere decir que se tenga que trata de forma diferente y no sean iguales ante Allah”, resalta el teólogo.