Querida Claudia: En junio de 2016 escribía una nota a este mismo periódico felicitándote por tu graduación. Muy poco tiempo después lo vuelvo a hacer para decirte públicamente lo orgullosos que nos sentimos de ti. Alcanzar el objetivo que te propusiste ha sido una tarea titánica pero ha valido la pena. Siempre supiste que en el esfuerzo, la dedicación y la renuncia a muchos momentos felices con amigos, familia, pareja y demás, estaba la clave de tu éxito. El compromiso que asumiste con tu sueño es lo que ahora te hace ser una gran triunfadora.
Te felicito porque nunca te conformaste con ser talentosa, has trabajado muy duro para conseguir tu sueño, eso te ha llevado a tu meta y por eso hoy has conseguido tener tu plaza de enfermera.
Eres todo un referente para quienes desean lograr cosas importantes en el futuro. Te lo mereces y tengo claro que el futuro te depara grandes oportunidades de seguir creciendo profesionalmente.
Gracias Ceuta, gracias Victor y familia, por acoger y querer a mi niña.
Te queremos muchísimo.