El Juzgado de Instrucción número 1 de Ceuta ha acordado este miércoles el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del ciudadano marroquí detenido cuando transportaba a dos personas en una moto de agua. Está investigado por un presunto delito contra el derecho de los ciudadanos extranjeros, según han confirmado fuentes judiciales a El Faro.
A esta persona la detuvo la Guardia Civil con dos inmigrantes marroquíes en su moto de agua, a tres millas de Punta Almina, cuando pretendía alcanzar las costas peninsulares con la pareja introduciéndola de manera irregular. Los agentes del Servicio Marítimo abortaron su trayecto, procediendo a su detención.
Lo curioso es que esa detención se tuvo que practicar en dos ocasiones, porque una vez que el piloto se había cambiado de ropa, intentó escapar desde la base en el puerto deportivo, siendo alcanzado por los agentes a la altura del Poblado Marinero. Por esa escapada no se le aplica nuevo delito porque no se contempla como tal en la jurisdicción.
Los dos inmigrantes marroquíes que pretendía trasladar a la Península fueron atendidos por la Cruz Roja, que desplazó a una unidad del ERIE, comprobando que estaban bien de salud. Tras su reconocimiento, se dictó para ambos una orden de expulsión a Marruecos al tratarse de súbditos del vecino país. La Guardia Civil se quedó con la moto de agua intervenida en la base, en donde se acumulan más vehículos y embarcaciones que han sido usadas para la práctica de delitos.
El detenido ingresará en la cárcel de Mendizábal a la espera de juicio, debiendo responder de un delito contra el tráfico de personas que está penado y castigado en el Código Penal. En este caso no consta que se pusiera en riesgo la integridad de los inmigrantes, como ocurre en otras ocasiones en las que son arrojados al mar