La autoridad judicial ordenó en Ceuta el ingreso en prisión provisional del conductor de un vehículo detenido con casi 28.000 pastillas de Rivotril en el depósito de combustible. Dieron con él después de comprobar que presentaba la ITV falsificada, verificando después que ocultaba este lote de benzodiacepinas.
Tras su puesta a disposición judicial se ordenó su entrada en prisión preventiva a la espera de juicio acusado de un delito contra la salud pública.
Permanecerá en Mendizábal hasta que se dicte la apertura del juicio oral.
Efectivos del Servicio Cinológico y Compañía Fiscal y de Fronteras de la Comandancia de la Guardia Civil fueron los que dieron con este varón de 52 años recién desembarcado de Algeciras a bordo de un turismo en el que llevaba puesta una pegatina de la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) como si la hubiera superado en 2022 pese a no haberlo hecho.
Tras revisar a fondo el coche los guardias encontraron en el depósito de combustible cerca de 28.000 comprimidos de benzodiacepinas. Al delito contra la salud pública se le sumó otro de falsificación documental. Los hechos tuvieron lugar a las 9.30 horas de este domingo en el puesto de reconocimiento y control de los vehículos que desembarcan en Ceuta de los ferry procedentes de Algeciras. Al revisar un utilitario de matrícula nacional que iba ocupado por una persona los funcionarios constataron que según figuraba en la base de datos de la Dirección General de Tráfico (DGT), la ITV la tenía caducada desde julio del año pasado, pero en su luna delantera llevaba una pegatina como si en realidad la tuviera vigente hasta este mes.