Agentes de la Policía Nacional, con toda la brigada de Extranjería al completo, han comenzado el operativo de identificación de los marroquíes, atrapados en Ceuta que van a salir de regreso a Marruecos. El lugar elegido ha sido el pabellón Santa Amelia, cuyos alrededores están llenos de personas desde primera hora de esta mañana. Pero esta es una imagen más, la que completa un abanico de ilustraciones marcado por el desconcierto. Y es que durante toda la noche han acudido personas a la frontera del Tarajal, al pabellón de La Libertad o incluso a las proximidades de la Delegación del Gobierno con un único fin: saber si estaban en la famosa lista de elegidos para la repatriación.
Esa es la clave de todo este asunto. La lista, dijo anoche Delegación, está formada por personas seleccionadas por Marruecos. ¿Quiénes están ahí? Se supone que les han ido llamando, pero también es cierto que algunos de los que intentaban ser localizados no eran encontrados. El problema es que esa lista debe estar formada por unas 300 personas y en Ceuta, al menos, hay 700 atrapados. ¿Cómo saben quiénes son los elegidos?
Tras hacerse oficial que hoy sería el día designado para la primera de las repatriaciones comenzó el descontrol. Llamadas de teléfono, mensajes en Facebook… una cadena de preguntas constantes sin respuestas hechas por personas que están desesperadas y que solo quieren abandonar Ceuta, en donde quedaron atrapadas el 13 de marzo nada más cerrarse el paso fronterizo.
Las inmediaciones del ‘Santa Amelia’ están llenas de personas y allí la Policía tiene ahora la encomienda de mirar, uno por uno, a todos los integrantes de la lista para proceder a su traslado a la frontera en autobuses. Antes de este capítulo final previo a cruzar el paso del Tarajal, tendrá que haber una confirmación clara de quien es quien. Las labores de Extranjería están viéndose reforzadas por agentes de Seguridad Ciudadana para evitar altercados y sobre todo frenar el posible caos que pueda producirse ante no solo la cantidad de personas concentradas sino la desesperanza que viene marcando su periplo en Ceuta.
Los agentes disponen de la lista para ir comprobando uno a uno todos los que subirán al autobús. Mientras, a la frontera han llegado varias personas sin saber dónde tenían que ir, igual que ha sucedido en el pabellón de La Libertad. La Policía no sabía qué decirles y, desesperados, iban como peonzas de lado a lado. En taxis (por primera vez en meses ha habido ‘carreras’) o en coches particulares se van acercando hacia el ‘Santa Amelia’ buscando, al menos, una explicación.
Policía para frenar el caos y colas masivas de personas
La Policía se ha desplegado con gran cantidad de agentes para, por un lado, regular el tráfico en la zona y, por otro, ordenar a la cantidad de gente que está llegando a las inmediaciones del polideportivo. Con carros, incluso personas mayores en silla de ruedas, con sus maletas… Muestran sus pasaportes a la Policía y esta va cribando a los elegidos.
La Policía ha establecido dos tipos de controles y ordenado un par de filas de hombres y de mujeres. El primero de los controles, a las puertas del ‘Santa Amelia’, lista en mano. Allí la Brigada de Extranjería va mirando uno por uno, en una inicial comprobación, que quienes se presentan sean las personas que están en el listado elegido por Marruecos y que tantos quebraderos de cabeza ha dado en estos días. El segundo de los controles se ha establecido en el polideportivo.
Las escenas que pueden apreciarse son las de una carretera llena de gente, en la que se intenta controlar el tráfico, y a donde no dejan de llegar vehículos con personas. Antes van a la frontera del Tarajal, en donde los guardias civiles les están indicando que allí no pueden permanecer. De hecho se ha avisado también al servicio público de taxi que no acuda a la frontera. Todos son desviados a este lugar y allí, cada vez que van pasando los minutos, impera el caos.
Todas las prevenciones que se han ido dictando de evitar aglomeraciones de personas, que no haya colas, que todos llevemos mascarillas… se pierden en este escenario en donde impera la desesperación. Desde que el 13 de marzo Marruecos cerró la frontera para que, días después, hiciera lo propio España comenzó una auténtica tortura para las personas que han quedado atrapadas: trabajadores transfronterizos, mujeres que prestaban servicios en las casas… Durante este tiempo a los marroquíes acogidos en los pabellones se han sumados los cientos que había en casas o a cargo de asociaciones. Entre todos ellos priman las mismas dudas: ¿estaremos o no en esas listas?
El lado más dramático: ‘No, tú no estás en la lista’
Junto a las personas que van siendo registradas por la Policía y que están en la lista de ‘elegidos’ para regresar a su país, asoma el lado más dramático de la jornada. Ese sin duda lo representan aquellos que han llegado hasta las proximidades del ‘Santa Amelia’ pensando que quizá podrían tener la oportunidad de ser los que se subirían al autobús para cruzar, a las 11:00 horas la frontera. ¿Con qué se han encontrado? Con un no ‘no pasas’ porque ‘no estás en la lista’.
Molestas, algunas de las que no podrán volver a su país para celebrar el final del mes sagrado de Ramadán han mostrado ante las cámaras de El Faro sus pasaportes. No entienden por qué no pasan, tampoco saben de dónde ha salido la lista y, sobre todo, qué criterios se han seguido para que unos sí que vayan y otros no. Preguntan a este periódico si nosotros lo sabemos. Ni tan siquiera la Delegación del Gobierno ha comunicado lo que todos quieren saber, lo que es necesario conocer para que esta historia se tiña al menos de algo de transparencia.
La semana pasada desde la plaza de los Reyes se dijo que la lista la hacía la Policía. Ayer noche aclaró que el listado lo ha mandado a Marruecos. ¿Pero de qué identidades se ha nutrido?, ¿cómo se ha elegido quien sale y quien no? Nadie responde. La Policía, a pie de campo, hace bien su trabajo y tiene claro que comprobará uno a uno los pasaportes con las identidades reflejadas en el listado que le ha sido facilitado. Por su parte no va a haber error alguno. Los que no están en la lista no salen.
Los agentes de la Policía Nacional hacen su trabajo con la celeridad que pueden y dejan atrás escenas de auténtico drama. Escenas como la de un matrimonio con hijos, preparados con sus maletas que no han podido pasar. O de jóvenes marroquíes como Halima Marlamaghi, de 19 años, que muestra su pasaporte y no entiende por qué no puede regresar a su país o Rabia Maraoulad Ghalem, 59 años. En el primer control se les ha dicho que no pasan.
A los bajos de Sidi Embarek a pedir explicaciones
Hasta la explanada de la mezquita de Sidi Embarek han acudido personas, en goteo, quejosas por no haber formado parte de la lista. Han acudido a los bajos de este templo para contactar con la oenegé Luna Blanca buscando explicaciones. Son muchos los que no subirán al autobús: familias al completo, madres con sus bebés… todos con sus maletas. Quieren saber por qué ellos no han podido subir al autobús.
En ‘Luna Blanca’ intentan atender a los que llegan, desesperados, aunque ellos no tienen responsabilidad alguna en este asunto. Les llegan cuantiosos problemas, gente desesperada porque necesita volver a su hogar. En los bajos de la mezquita se repiten las escenas con las que se ha tenido que enfrentar. Personas como Aicha Marhaltout, de 62 años, que se ha acercado hasta Sidi Embarek.
Una vez intentando buscar respuestas y la calma a sus problemas, algunos regresan al ‘Santa Amelia’ en donde poco a poco se van aligerando las colas de personas para intentar subirse al bus.
Que vergüenza, aquí no regresan todos los marroquíes que quieren volver a a su país, sino los que elige Marruecos. ¿Pero cuáles son los criterios? ¿Una repatriacion a la carta? Y mientras tanto los contribuyentes españoles pagando su manutención y Marruecos sin responsabilizarse...... ¿Y el gobierno español que hace? Tragar, tragar y tragar. De vergüenza.
La lista de Mohamed. Solo en cines (de Ceuta).
El insulto más grande a una persona es no dejarle entrar en su propio país. Esto no es cosa de listas, se trata de personas. Tienes pasaporte marroquí, quieres entrar en tu país, pues deberías poder hacerlo. La lista es una tomadura de pelo a estas personas.