Los inmigrantes buscan la salida a la península de cualquier manera, sin importar que arriesguen sus vidas. En el caso de los argelinos es mucho más dramático porque la única forma que tienen de llegar al otro lado es colándose en camiones o a bordo de embarcaciones, debido a que se han convertido en un colectivo bloqueado. Diez de estos inmigrantes quisieron salir en la madrugada del miércoles desde la playa de La Bolera, a bordo de una pequeña barca de solo metro y medio por dos, con motor de 15 caballos. La intervención de componentes del 092 de la
Policía Local fue determinante para que no se produjera una tragedia, dada la cantidad de personas que querían partir en una barca con la que era imposible alcanzar el otro lado. La
Guardia Civil se encargaría, ya una vez sacados por el 092 del agua, de trasladarlos en una de sus unidades. Los policías locales que actuaron se toparon inicialmente con dos individuos que se encontraban a la altura de la escalera que conduce a la playa y que, al ver la patrulla, empezaron a correr. Así descubrieron que se estaba intentando llevar a cabo una salida de diez argelinos y que algunos ya estaban sobre la barca. Agentes del Grupo del 092 de servicio pudieron sacar a los inmigrantes del agua así como alcanzar a los que pretendían escapar por las piedras. Les controlaron y comprobaron su estado de salud hasta la llegada de la Guardia Civil que se hizo cargo de todos ellos para su traslado, pero no fue el Cuerpo que actuó desde el inicio. De no ser por la intervención pronta para evitar la salida, teniendo en cuenta la forma de viaje pretendida, podría haber ocurrido una tragedia.