La titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Ceuta ha dejado visto para sentencia un juicio por un delito contra la salud pública. El acusado ha reconocido los hechos, pero se ha discutido por parte del Ministerio Fiscal y la Defensa la pena a aplicar para el acusado.
El Ministerio Público, debido al reconocimiento de los hechos del acusado, ha rebajado la pena y solicitado la pena de 3 años y 10 meses de prisión, así como el pago de una multa de 85.127,2 euros con 3 días de responsabilidad personal subsidiaria en caso de impago. Por otra parte, la Defensa ha solicitado que se le aplique atenuante por colaboración con la Guardia Civil y otro por drogadicción, por lo que la pena a imponer sería de 1 año 6 meses de prisión.
Los hechos a los que se ha aludido en este juicio ocurrieron en enero de 2020. Concretamente el 11 de enero, sobre las 19:50 horas, cuando el acusado se encontraba en la estación marítima de Ceuta con el propósito de embarcar con un vehículo en un ferry para trasladarse a la Península.
Al infundir sospechas a uno de los agentes de la Benemérita que se encontraba de servicio en la zona, decidió apartar el coche y llevarlo al taller para realizar distintas comprobaciones. En ese sentido, el acusado ha reconocido estos hechos, pero ha aclarado que no cargó el coche por lo que no sabía la cantidad de droga que transportaba.
Como consecuencia del registro, se encontraron ocultos en el interior de un doble fondo del vehículo, la cantidad de 140 bloques y 500 capsulas de resina de hachís, con un peso neto de 53.204,5 gramos de los cuales 5.193 gramos tenía un índice de THC del 41,46% y los otros 48.011,5 gramos un índice de THC del 25,46%, que el acusado pesaba destinar a la venta o donación a terceras personas. El valor de la droga incautada se estableció en 85.127,2 euros.
En la lectura de los informes, Fiscalía cambió la pena inicial y solicitó la pena de 3 años y 10 meses de prisión. Además se opuso a la suspensión de la pena.
La Defensa por su parte solicitó que se le condenara a una pena de 1 año y 6 meses de prisión, ya que entiende que existiría un atenuante de colaboración con la Guardia Civil. El acusado fue visitado a prisión hasta en dos ocasiones y que gracias a esa colaboración, la Benemérita llevó a cabo una destrucción de una plantación de marihuana en un pueblo de Galicia que es donde reside. Además, de aplicarle otro atenuante ya que sigue un proceso de desintoxicación y en el momento de los hechos era consumidor.