La AD Ceuta sigue sin lavar su imagen en esta temporada y ayer volvió a ofrecer su peor versión ante un rival mediocre y que no demostró en ningún momento ser superior. La Asociación ejerció de local en el nombre porque apenas inquietó el marco visitante y no tuvo oportunidades en ningún momento de llevarse los tres puntos.
Era un encuentro clave para el Don Bosco, ya que se jugaba buena parte de sus opciones de conseguir la permanencia. Sabía que logrando los tres puntos tomaría una distancia casi definitivo sobre sus perseguidores.
El choque fue malo para los dos equipos, que se limitaron en todo momento a pegar pelotazos y a espera las segundas jugadas para intentar marcar. El primer remate a puerta fue obra de Lirio desde la frontal y lo despejó perfectamente el portero.
El Don Bosco, en su primera llegada, iba a abrir el marcador. Balón dentro del área y Polo remata al larguero y el balón bota dentro según el colegiado, porque la jugada fue protestada por ser un gol fantasma. Pero finalmente subió al marcador.
El Ceuta no reaccionó y siguió con el mismo juego que hasta ahora. La única ocasión clara del primer tiempo la tuvo Carlos en el minuto 27, en un remate que despejó la defensa a córner. Con 0-1 se llegó al final de la primera mitad.
Si la primera mitad fue algo mediocre, la segunda fue aún peor lo único salvable de estos cuarenta y cinco minutos fueron los goles del equipo visitante.
En el minuto 54, Lirio disparó al larguero por arriba un saque de esquina y ahí se acabó el poder ofensivo de los ceutíes.
Pasaban los minutos y se veía que el Don Bosco iba a matar el partido a la contra. En una de ellas, el árbitro señaló penalti sobre Antolín. Polo era el encargado de lanzarlo y lograr el 0-2
Los otros dos tantos del encuentro no tardaron en llegar ya que en ocho minutos se produjeron. Primero Antolín sólo ante Nadir y luego Villega sentenciaron el partido.