El Tribunal de Apelación de Rabat, en Marruecos, ha condenado a cuatro coroneles de la Gendarmería y a quince oficiales de rangos inferiores a penas de entre uno y cinco años de prisión firme por su implicación en tráfico de droga a escala internacional.
Según informó este miércoles la cadena de televisión privada Telemaroc, la corte condenó la noche del pasado lunes a un excomandante regional de la Gendarmería Real en Tánger (norte), con rango de coronel, a cinco años de prisión.
Otros tres coroneles fueron sentenciados a entre uno y tres años de prisión y todos ejercían también de comandantes regionales en diferentes períodos en la ciudades de Tánger, Agadir (sur) y Settat (centro).
Están implicados en una trama de tráfico de drogas en la que fueron condenadas, en un proceso separado, setenta personas, entre narcos, policías y otros funcionarios del Estado, a un total de 176 años de prisión.
La cadena marroquí indicó que otros siete oficiales de la Gendarmería de Marruecos, con rangos inferiores, fueron sentenciados cada uno a cuatro años de prisión firme, mientras ocho agentes recibieron penas de entre tres y un año de cárcel.
La Fiscalía les acusó de graves delitos como recibir sobornos, revelar el secreto profesional y participar en la exportación de grandes cantidades de hachís, ya que uno de los narcos reconoció durante el juicio haber obtenido de ellos facilidades para exportar un total de 400 toneladas de esta droga.
Marruecos es uno de los principales productores y exportadores de hachís del mundo y los decomisos de esta droga son recurrentes en puestos fronterizos, entre ellos el que separa al vecino país con Ceuta a través del punto de Bab Sebta, y puertos.
Los servicios de seguridad marroquíes se incautaron entre enero y septiembre del pasado año 2019 de 112,13 toneladas de hachís, casi el doble de todo lo decomisado en 2018 (60,17 toneladas).