El Gobierno de Ceuta sigue apuntalando la habilitación de un Centro Multicultural de casi 170 metros cuadrados en las dependencias anexas a la ermita de San Antonio. Unas ejecuciones que tendrán un coste final de 150.000 euros.
Los operarios comenzaron con los primeros movimientos, demoliendo diferentes estructuras y con las construcciones de las que serán en un futuro las diferentes habitaciones.
En la actualidad, los operarios se encuentran en las diferentes habitaciones con diferentes labores para la rehabilitación de esos espacios. Unos habitáculos que se encuentran en “muy mal estado”. Se persigue “adecentar” las dependencias que se encontraban ocupadas como centro de acogida de menores migrantes solos hasta que, tras su traslado a Hadú, quedaron “en un estado de abandono”, señala el proyecto de la Consejería de Fomento.
“Han sufrido el vandalismo y se han utilizado para dejar algunos restos de obra de la intervención última en el espacio exterior con la construcción reciente del atrio y los jardines del entorno”, prosigue.
Ahora se busca “poner en valor el esfuerzo anterior y finalizar el conjunto de las actuaciones completando la integración de lo edificado preservando la consolidación, conservación y sostenibilidad del patrimonio cultural de Ceuta”.
Así, el conjunto compuesto por la ermita del siglo XVI y sus dependencias anejas “está destinado a ser uno de los lugares de obligada presencia y disfrute del patrimonio cultural y paisajístico de la ciudad y el Estrecho de Gibraltar”, según los autores del proyecto de obra.
La actuación planificada parte de la conservación del material original, ya que se trata de una intervención de conservación y limpieza, más la recuperación de los aspectos originales incluidos en el edificio, posibles cromatismos clásicos de la pintura jabelga o estucados tradicionales, en su caso, a juicio del director facultativo de las obras.
También respetará “las características y valores esenciales del inmueble, puesto que se conservan las características volumétricas, espaciales, morfológicas, suprimiéndose las intervenciones puntuales y claramente impropias, realizadas en época reciente y sin consideración respecto al conjunto edificado anejo a la ermita”.
Los trabajos se están ejecutando “con las máximas precauciones, de modo que se asegure que no afectan a los elementos constructivos origen u otras zonas de la ermita”.
Se ha realizado un trabajo previo como es el desmontaje de la totalidad de las instalaciones existentes en la actualidad en el interior tratando de evitar el deterioro de los soportes y el picado de los paramentos se efectuar a en función del diagnóstico de las patologías que presenten.
La demolición de elementos impropios e incluso el desmontaje de las instalaciones se están acometiendo “con el máximo cuidado”, de modo que al extraer los anclajes no arrastren los cuerpos de las fábricas. Las demoliciones con extracción se están haciendo siempre con medios manuales y con especial precaución para evitar que se produzcan desconchados o roturas.