La
iglesia de
San Juan de Dios, ubicada en la barriada de
Villajovita de Ceuta, ya tiene oficialmente un nuevo párroco. Se trata del padre Guillermo Ibarra que, en julio de 2020, fue ordenado diácono de la Diócesis de Cádiz y Ceuta en una ceremonia presidida por el obispo Rafael Zornoza. La misma autoridad religiosa que en la tarde de este sábado le ha entregado las llaves de la parroquia. Ha sido un acto simbólico pero importante para la Iglesia y para los feligreses. Sobre todo para los que acuden a esta iglesia que ahora tendrán en el padre Guillermo a su párroco de referencia, ya que estrena su labor aquí. En el acto se ha procedido además a la bendición de la entrada de la iglesia.
Al acto de entrega de las llaves ha asistido no solo el obispo diocesano sino también miembros del Seminario Redemptoris Mater de Cádiz y Ceuta, del que el padre Guillermo fue seminarista. Ha sido un acto de toma de posesión íntimo y emotivo además de importante para la barriada que encuentra en su iglesia ese punto necesario de reunión y encuentro de fe tan destacado para la ciudad, y más en estos momentos delicados de pandemia que estamos sufriendo.
Tal y como la propia Diócesis reflejó cuando el padre Guillermo fue ordenado, tiene por delante un servicio que es el de ayudar al “ministerio del Obispo y del presbiterio, sirviendo en tres campos: la Palabra, con la predicación y la catequesis, sobre todo; el altar, a través de los sacramentos; y la caridad. No se trata de prestar una ayuda cualquiera, sino de ser un servidor, un diácono al estilo de Cristo. La condición fundamental que hoy te recuerda la Iglesia es que seas, ante todo, un verdadero discípulo”, recoge la entidad diocesana.