Sí. El Ceuta ha tenido suerte. Tendrá enfrente al que es, posiblemente, el mejor equipo del mundo. En sus filas hay ocho campeones del mundo y también está el mejor jugador del mundo, Messi. Es el mejor del mundo. No se puede dudar. Lo dice un madridista. Pero soy de los que piensan que no es el rival más atractivo para una Copa del Rey ¿Estoy majara? Lean mis argumentos.
Si Pep Guardiola dosifica contra equipos de Primera División (ayer Piqué, contra el Sporting, estaba en el banquillo), imaginen lo que hará contra un equipo de Segunda División B.
Ya Zubizarreta, director técnico del club, ha avisado que tienen jugadores del filial lo suficientemente buenos como para afrontar tres competiciones. Para mí una declaración de intenciones en toda regla.
Es cierto. Según la normativa, en el campo tiene que haber siempre siete futoblistas del primer equipo. Me temo que no vamos a ver a Messi, y si me apuran tampoco a Iniesta. Son conjeturas. Escribe un pesimista.
Yo habría preferido un Real Madrid, no por mi condición de ‘merengue’ (que un poquito también), sino porque después de los ‘batacazos’ consecutivos en Copa ante el Real Unión y sobre todo el Alcorcón no se arriesgará a un nuevo tropiezo.
En el bombo había otros equipazos, como el Valencia, que ha arrancado con fuerza la Liga, o el Atlético de Madrid, con Diego Forlán, el mejor del Mundial de Sudáfrica, en sus filas.
Repito, jugar contra el Barça es un sueño para cualquier club modesto como el Ceuta, pero hilando fino creo que no era la mejor opción ¿Sigo siendo un majara? Mis disculpas.