La labor divulgativa del CNP se ha centrado en el último tramo de la Semana Santa, y en este Lunes de Pascua, en aconsejar a los padres que eviten asustar a sus hijos con la figura del policía nacional. En Ceuta es una práctica habitual asemejar a los agentes con "el coco" cuando los niños muestran alguna falta de educación.
"No asustes ni amenaces a los niños con que la policía se los llevará si se portan mal", recomienda el Cuerpo Nacional de Policía a través de su canal de WhatsApp. "No somos el coco. Enséñales que estamos para ayudarles. Diles que acudan a nosotros si se pierden o si están en peligro", añade a su mensaje en este servicio de mensajería.
Esta acción comunicativa viene acompañada de un vídeo que recrea una secuencia en la que una menor, perdida en la calle, se acerca a un agente para pedirle ayuda ya que no sabe dónde se encuentra su madre. El auxilio del policía es inmediato y, mediante la psicología, tranquiliza a la pequeña mientras se pone en marcha para dar con el paradero de su familia.
Los efectos de asustar a los niños con la Policía
Asustar a los niños diciéndoles que si se portan mal se los llevará la policía puede tener efectos psicológicos negativos y fomentar el miedo y la desconfianza hacia las figuras de autoridad. En lugar de enseñarles sobre la importancia de comportarse correctamente por el respeto a la ley, esta táctica puede generar ansiedad y estrés innecesarios en los niños.
Además, podría distorsionar su percepción de la policía, haciéndoles verlos como amenaza en lugar de protectores de la comunidad. Es esencial fomentar un ambiente de confianza y diálogo abierto con los niños, donde se les explique de manera clara y comprensible las razones por las cuales deben comportarse adecuadamente, enfatizando el valor del respeto mutuo y la responsabilidad personal.
Enseñarles sobre las consecuencias de sus acciones de una manera constructiva y educativa es mucho más efectivo para promover un comportamiento positivo a largo plazo.
De tanto asustarnos, aun seguimos teniendo miedo.