¿Son inseguras las barriadas de la periferia? Esta pregunta fue el punto de partida de ‘La Tertulia’ de los miércoles en COPE Ceuta y FARO TV. Los invitados a la mesa de debate fueron Abdelkamil Mohamed, presidente de la Asociación de Vecinos de Príncipe Alfonso, y Mohamed Abdel-Lah Selam, su homólogo en Doctora Soraya, en las 170 viviendas junto al Hospital Universitario. Ambos son portavoces vecinales en el epicentro de los sucesos que llevaron a Loma Colmenar a manifestarse el pasado domingo y donde, en apenas tres días, un conductor de autobús ha sido atracado y uno de estos vehículos de servicio público ha sido apedreado.
“Los padres no dejan a sus hijos que salgan a la calle por miedo; no se ve a niños jugando en las calles, la gente está asustada”, sentenció el presidente de Doctora Soraya, quien recordó el robo y la brutal agresión de la que fue víctima un pequeño de 10 años a comienzos de mes. “No podemos permitir que esto suceda con otro niño más”, espetó Mohamed. Una zona, Loma Colmenar, en la que, advirtió Abdel-Lah, está el centro hospitalario “y hay personas que vienen de visita y aparcan sus coches”.
Por su parte, el representante del movimiento vecinal en Príncipe Alfonso advirtió de que la seguridad en las barriadas periféricas “deja mucho que desear” respecto al Centro porque, pese a la presencia policial, “no es tan continua como en otros lugares”.
Mohamed recordó que llevan una década solicitando medidas a raíz de “unos años bastante negros por los tiroteos y asesinatos que hubo”. Una oleada que, resaltó, ha ido decreciendo porque, indicó, “hay que valorar el trabajo de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad que han actuado, hubo muchas detenciones y, gracias a eso, ha rebajado un poco el nivel tan alto de inseguridad que se vivía”. Sin embargo, añadió Mohamed, en la actualidad padecen otro tipo de falta de seguridad que es el caos en todas las barriadas periféricas, en referencia también al desorden circulatorio.
Mohamed y Abdel-Lah coincidieron en que resulta necesaria “más presencia policial porque son zonas conflictivas”, pero no cuando el incidente ya ha ocurrido, sino que patrullen o estén de manera preventiva.
Una demanda que elevaron tanto a la Ciudad Autónoma como a la Policía Nacional. El representante vecinal de las 170 casas de Loma Colmenar también lanzó una pregunta al Partido Popular (PP): “El presidente de la Ciudad no se digna a ir a las barriadas periféricas a conocer cuáles son nuestros problemas. Cuando queremos entrevistarnos con el consejero de turno, nunca nos reciben. ¿Por qué no vienen? ¿Porque allí no tienen tantos votos? Solo está viniendo la oposición a visitarnos”. No obstante, reiteró al Gobierno autonómico una petición: “Que no se olviden de nosotros”.
Esa “indefensión” a la que aludió el presidente de Doctora Soraya fue retomada por Mohamed para recuperar el concepto de la “falta de seguridad subjetiva”, enarbolada por las autoridades ante escenarios como el actual en Loma Colmenar.
Para el portavoz vecinal de Príncipe Alfonso, en parte se podría resolver “si escuchasen al ciudadano” porque, a su juicio, en estos últimos tiempos por parte del Gobierno “no están habiendo conversaciones” con las asociaciones de vecinos pese a que son “la voz que representa al ciudadano de a pie”. Una actitud que, apostilló, denota una “falta de responsabilidad” que puede resolverse si ambas partes se sientan alrededor de una mesa a hablar e “intercambiar opiniones y soluciones”.
Como ejemplo de la violencia en el entorno fronterizo, que ha encontrado en las colas de vehículos un lugar donde propagarse, Abdel-Lah desveló que una pedrada desde el monte de Loma Colmenar “partió el cristal del coche de una señora y a la mujer la estuvo atendiendo la ambulancia en la carretera nacional”.
Sobre la barriada Príncipe Alfonso siempre ha pesado el estigma de que –con razón o no– la delincuencia azota sus calles. Sin embargo, de un tiempo para acá, parece que la criminalidad se ha descentralizado y los hechos delictivos se ceban ahora en el entorno de la carretera de la frontera.
El responsable de la entidad que da voz a la barriada explicó que son muchos los jóvenes, incluso padres de familia, quienes “bajan a la frontera a intentar pasar los bultos como hacen los marroquíes y, sin embargo, no les dejan ganarse 10, 20, 30 euros por tener pasaporte español”.
Entonces, ¿qué pueden pensar esos jóvenes? “Como no les dejan, se junta tres o cuatro y se ponen a cometer atracos en las naves o en la periferia”, razonó Mohamed quien lamentó que “una cosa lleva a la otra” y, matizó, “en ningún caso justifico esas actitudes”.
Ambos piden formación y medidas contra el desempleo pero también hacen “autocrítica”
El presidente de la Asociación de Vecinos del Príncipe Alfonso, Abdelkamil Mohamed, no solo culpó de ese “vacío” en la seguridad a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad o a los políticos de turno, sino que hizo énfasis en actuar en otros ámbitos.
Este portavoz vecinal apuntó a más factores porque, lamentó, “una gran cantidad de jóvenes de esta ciudad van a la deriva y son fáciles de captar por cualquier grupo delictivo”.
Una situación que degenera en colectivos que “delinquen, no tienen formación, con un fracaso escolar con unos niveles que batimos récords, al igual que en el paro juvenil y sin hablar del desempleo en general”.
Quizá, opinó Mohamed, eso tenga que ver con los “actos vandálicos de jóvenes y atracos”. Pero también, prosiguió el interlocutor de los vecinos de Príncipe Alfonso, no solo tuvo reproches para los jóvenes ceutíes al reparar en que el paso fronterizo lo cruzan al día 30.000 o 40.000 personas del país vecino y los hay “que vienen a delinquir a la ciudad”.
Un dato, señaló, a tener en cuenta. La tutela de los menores extranjeras no acompañados (MENA) por parte de la Ciudad también fue puesta en entredicho por Mohamed puesto que, a su parecer, “al final salen delinquiendo en vez de ser jóvenes de provecho para la sociedad”. En definitiva, problemas que van acumulándose y a los que, lamentó, no se les está dando soluciones.
Mohamed Abdel-Lah Selam, presidente de la Asociación de Vecinos Doctora Soraya, llegó a la misma conclusión expuesta por Mohamed y solicitó a las autoridades que “den solución a esos jóvenes” porque las medidas contra los atracos y los apedreamientos son circunstanciales “pero hay que abordar el problema de raíz” mediante formación.
Mohamed hizo un inciso para realizar una “autocrítica por parte de los padres”: “Tenemos que ser más cívicos, respetar más las normas aunque ya sabemos que la situación no es favorable porque hay mucho paro, los padres no llegan a fin de mes, la mayoría con ayudas…
Es muy complicado darle unos estudios a los hijos pero hace falta una implicación total de los padres y que la Administración asesore a los padres y les apoye porque esto se no está yendo de las manos, se agravará más el tema de los jóvenes, irá aumentando la delincuencia” hasta un “descontrol total”.
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