¿Quién no ha soñado alguna vez con convertirse en alguno de sus superhéroes? Disfrazarse de su personaje de animación favorito, vivir intrépidas aventuras y explorar el mundo sobre una bicicleta, levantar grandes torres de construcción o poner en práctica los cuidados a través de unos muñecos. Son solo algunos ejemplos de las infinitas posibilidades que regalan los juguetes. Hace diez años Diana Sánchez comenzó su propia aventura. Una idea y un negocio que ha ido evolucionando con el paso de los años.
“La verdad, que se empezó con un trocito de tienda yo sola y, con el tiempo y los años y trabajando bastante, empezamos a ir haciendo obras y a ampliar la tienda. En esta del centro ya han pasado casi diez años y más o menos hace un año abrimos la de Hadú. La verdad que hemos estado funcionando muy bien hasta que ha llegado la pandemia”, contó Diana Sánchez, propietaria de la tienda.
‘La Casita de Kitty’ lleva ya diez años ilusionando y emocionando a los más pequeños, pero empezó siendo una tienda muy pequeñita en el centro. “Se llama la casita de Kitty por eso mismo porque empezamos con productos muy relacionados con Kitty en esa época y poco a poco fuimos metiendo licencias de textil así que iban pegando y las que iban saliendo nuevas cada año hasta el día de hoy, que ya estamos metidos en todo y en juguetería también, que llevamos ya casi tres años. Intentamos trabajar todas las campañas de carnavales, colegio y todas las líneas que podemos”, explica.
Sin embargo, lo que iba a ser temporal para Diana se convirtió en gran parte de su vida. Una pequeña tienda a la que también han afectado mucho estos meses de pandemia, pero que ha sabido seguir adelante. “El primer estado de alarma la verdad que lo llevamos bastante mal porque fue un imprevisto y muchos autónomos no sabíamos qué iba a pasar o si esto iba a durar muchos meses y no podríamos abrir. Está costando mucho salir porque el trabajo se ha complicado con el tema de aforos y medidas de seguridad. Todo se ha complicado y claro, las ventas han bajado un porcentaje bastante alto”, lamentó.
Supieron adaptarse a la situación y aumentaron su servicio de reparto a domicilio para evitar que los clientes tuvieran que desplazarse hasta la tienda. “Gracias a Dios tenemos toda la plantilla trabajando y se ha notado una bajada fuerte. Pero bueno, ahora estamos con la campaña de Navidad, que también está siendo más complicada porque estamos trabajando a través de los teléfonos y con reparto a domicilio, pero nos estamos adaptando lo que podemos”.
Una tienda que como tantas otras ha tenido que adaptarse a una nueva forma de trabajo. Esto ha hecho que a día de hoy sea una de las más visitadas de la ciudad, en la que los regalos más demandados por los niños son: Harry Potter, el videojuego de Fornite, Super Zing y Marvel, mientras que para las niñas, las muñecas Lol, las bolas de Unicornio, las Bellys y las Nancy. Muchos juguetes que los Pajes Reales ya están apuntando y apartando en estas tiendas.