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La entidad exige que un policía revise la documentación, ya sea de comunitarios o no, en el Puerto Deportivo por seguridad.
La Asociación Náuticos de Ceuta reiteró ayer a la Delegación del Gobierno, y en concreto a la Policía Nacional, su solicitud de extremar el control documental de las personas de países comunitarios o no que desembarcan en el Puerto Deportivo por razones de seguridad, en especial, después de la declaración del Nivel 4 de alerta antiterrorista con medidas de refuerzo y en pleno uso de las motos de agua por parte de las redes de tráfico de personas.
Esta entidad rompió un lanza en favor de los marinos de la concesionaria porque, como detalló, no tienen atribuidas estas competencias y tampoco se dedican en exclusiva a contar cuántas personas se apean.
La mayoría de estas embarcaciones, apuntaron desde Náuticos Ceuta, ejercen de taxi ya que se dedican a llevar y traer pasajeros. Todos los días, desveló el colectivo, ven las mismas embarcaciones, con los mismos pilotos pero con distintas personas a bordo. Incluso han sido testigos de barcos de Marruecos que descargan en los pantalanes, se han dado la vuelta y se han marchado. Una embarcación recreativa, destacó, es la mejor vía para pasar inadvertido. Ante esta casuística, solicita algún efectivo que vigile esos barcos al menos en temporada alta.
La flota que atraca en Ceuta oscila entre 10 y 15 embarcaciones diarias, con una media de seis a diez viajeros en función de las plazas disponibles, calculó la entidad, hasta 100 o 150 personas, en su mayoría marroquíes. En su momento, recordó la asociación, elevó una queja conjunta con Mahersa para que alguien ejerciese de filtro en la llegada y salida porque nadie garantiza que alguien se quede en Ceuta. Sin embargo, lamentó, la Delegación del Gobierno no movió un dedo. Desde la asociación solo esperan que nunca ocurra algo y reclaman el establecimiento de los mismos requisitos que para atracar en Marruecos.
El contraste entre el blindaje de la frontera del Tarajal –con la inspección rigurosa de todas las personas que acceden a Ceuta formando colas que enojan a la población– y la laxitud en el Puerto Deportivo desmoraliza a esta asociación ante la ausencia de cualquier tipo de autoridad que revise los pasaportes. A pesar de que el Puerto de Ceuta constituye una escala frecuente y un punto clave entre África y la Península por su rica gastronomía, atractivos turísticos y su tejido empresarial orientado al comercio.
Turistas con poder adquisitivo, pero sin sellar el pasaporte
La Asociación Náuticos consideró “estupendo” que a diario vengan entre 100 y 150 marroquíes de alto poder adquisitivo, según sus estimaciones, a comprar en los establecimientos de la ciudad porque su visita se traduce en ingresos. Sin embargo, su protesta estriba en que sus identidades nunca quedan registradas y tampoco se conoce si las mismas personas que llegan son las que se van. Una preocupación que no se limita al caso extremo del terrorismo, sino a la identificación de personas con órdenes de búsqueda y captura. La entidad alabó los esfuerzos hacia las pateras y las motos de agua dedicadas a la inmigración, pero dijo que no se es consciente del coladero del Deportivo.