Ha sido una jornada de recuerdo, de reflexión y de despedida. Los ojos del mundo han estado puestos en el Vaticano y se han fijado en lo que ocurría el sábado mientras se le daba el último adiós al papa Francisco.
Miles de personas han estado presentes en un día que quedará marcado en el recuerdo de todos, no solo de quienes profesan la religión Católica. Para ser más exactos han sido cerca de 200.000 los espectadores del funeral de quien ha sido descrito y homenajeado como un pontífice "entre la gente", "con el corazón abierto a todos" y que se dedicó "a los últimos de la Tierra y marginados".
La a plaza de San Pedro y aledaños han estado abarrotados de fieles que entre lágrimas de tristeza han rememorado la labor del papa Francisco, dejando claro que su legado quedará vivo en sus corazones.
Giovanni Battista Re, decano del colegio cardenalicio y encargado de oficiar las exequias ante 200.00 personas y más de 140 delegaciones internacionales ha hablado de las enseñanzas dejadas por el pontífice.
Jorge Mario Bergoglio ahora descansa en la basílica de Santa María la Mayor, pero quien fue en vida y lo que representó quedarán muy presentes entre quienes continúen su gran obra.