A los 86 años fallecía este viernes el teniente general Agustín Muñoz-Grandes, quien tuvo una importante vinculación a la vida militar de Ceuta, en especial porque en un tiempo estuvo al mando del Tercio Duque de Alba de La Legión. Según informan medios hispalenses, que ya se han hecho eco de la noticia confirmada por fuentes del ámbito castrense, sus restos mortales llegarán este sábado al tanatorio de La Paz de Tres Cantos, en Madrid.
De larga trayectoria, su padre con el mismo nombre, Agustín Muñoz-Grandes también fue un laureado que mandó en la División Azul. Cabe mencionar que Muñoz-Grandes fue ayudante de campo del rey Juan Carlos I, jefe de división del Estado Mayor, jefe de las Fuerzas de Acción Rápida del Ejército de Tierra y jefe de la División Acorazada Brunete, entre otros cargos. Presidió la Real Hermandad de Veteranos de las Fuerzas Armadas y de la Guardia Civil y fue miembro de la Real Academia de Ciencias Morales y Políticas.
Entre sus numerosas condecoraciones destacan la Gran Cruz de San Hermenegildo, la Gran Cruz del Mérito Naval y la Gran Cruz de la Orden del Mérito Militar.
Los hijos de los generales también estaban en primera línea de fuego
En una colaboración reciente rubricada por Antonio Herrero Andreu se narraba cómo algunos hijos de generales, como era el caso, también estaban en primera línea de fuego. Sobre Agustín Muñoz-Grandes Galilea se informaba que ingresó en la Academia General Militar como componente de la X Promoción, y, tras recibir su despacho de teniente de dicha promoción, obtuvo el número uno, así como años más tarde como capitán, también el número uno del curso de Estado Mayor. A su salida de la academia, como muchos de aquellos jóvenes oficiales, solicita destino a La Legión, siendo destinado al II Tercio Duque de Alba.
En 1957 aquel joven teniente sale con la VI Bandera en la 5ª Compañía de Ametralladoras con destino al África Occidental Española, al mando del comandante Enrique León Gallo, saliendo del puerto de Ceuta en el crucero ‘Méndez Núñez’ y llegando a Las Palmas de Gran Canaria el día 7 de diciembre de 1957.
Nada más llegar a dichos territorios, según consta en la Orden de Operaciones del Estado Mayor de las Fuerzas Militares de Ifni, dicha Bandera recibe orden de atacar en la denominada Operación Pegaso las cotas 332/325, 317/312, 300/272, 187 y 197 para asegurar la libre disposición de la carretera de Tabelcut a Erkunt.
En el mismo informe del desarrollo de dicha operación se especifica esto: “La VI Bandera de La Legión inicia el ataque a las 09:00 horas del día 1 de febrero de 1958, y tras un duro forcejeo ocupa la cota 435 y sobre las 09:30 horas, explotando el éxito inicial, ocupan la copa 325, y cuando eran las 11:45 la VI Bandera prosigue el avance hacia la cota 300 hacia el N.E., dejándolo a las 13:30 mientras la 13ª Compañía ocupaba las cotas 272 y 243, ocupando la carretera de Tabelcut teniendo que lamentar en esta operación cuatro muertos y siete heridos”.
El entonces coronel del Segundo Tercio de la Legión, Agustín Muñoz Grande, en el acuartelamiento del Tercio Duque de Alba. Pero con anterioridad la VI Bandera en la operación Netol, según la orden de operaciones (P-3) se detalla que el 30 de noviembre de 1957, al mando del comandante Enrique León Gallo, recibe la orden de liberar los puestos de Telata y Tiliuin. Finalizada la misma con brillantez, intervenía dicha bandera en organizar y defender el Centro de Resistencia de la denominada Operación Gento.
El entonces teniente Agustín Muñoz-Grandes, con su sección de asalto de la VI Bandera, realiza un reconocimiento armado sobre la costa norte del territorio, y tras romper el despliegue enemigo sobre el Buyarifen, progresa hasta las inmediaciones de Erkunt, desde donde apoya el conjunto de una compañía paracaidista de la I Bandera y, posteriormente, protege el repliegue.
De su humanidad lo avala el testimonio de un periodista que cubría la información en la línea de fuego, cuando una noche de mucho frío, el entonces teniente Muñoz Grandes, al ver tiritando de frío al periodista se quitó su capote y lo puso sobre sus hombros. Dicho periodista no era otro que Ramiro Santamaría.
D.E.P
En Sidi Ifni en el año 1957 me cruzé varias veces con él. La fama de ser hijo del General de Fanco del mismo nombre le precidía. En aquel tiempo era un hombre espigado cabello muy rubio y se le veia muy campechano. Despues, ja entrados en el siglo XXI, lo visitamos a instancias del también Teniente General Felix Sanz Roldan (Jefe del Jemad) una comisión de Veteranos de la Asociaxció Catalana de Vetranos de Sifdidi Ifni, de la que yo formaba parte, para tratar de solucionar un problema de tràmite. Nos recibió mu amablemente i la peticion fue cursada.
Yo servi bajo su mando, el la unidad de helicópteros Ii de Aiun, gran militar y mejor persona. Fue un honor estar a sus órdenes
Ha muerto un soldado de España,.otro más del. Tercio, como de los Viejos Tercios del Imperio..
La Bandera te cubrirá, compañero.
Y por fin, el buen Dios, te habrá puesto junto a tú padre.
Un gran hombre y un gran militar al igual que su padre. La muerte no es el final, Dios lo acoja DEP