Un narcotraficante ha perdido la vida en la noche de este lunes, a unas 40 millas de la desembocadura del río Guadalquivir, en Sevilla, después de una persecución de una lancha cargada de drogas. La embarcación terminó colisionando con una patrullera de la Guardia Civil. Situaciones límite a las que se enfrenta la Benemérita en el sur peninsular, pero también en Ceuta.
El accidente se produjo sobre las 19:00 horas de este lunes cuando la patrullera comenzó a seguir a una narcolancha y se produjo una colisión entre ambas.
Fuentes de la Guardia Civil en Cádiz han señalado que la lancha, que contaba con tres motores, llevaba a bordo a cuatro personas. Además de la persona fallecida, otro de los ocupantes resultó herido y tuvo que ser evacuado en helicóptero hasta el hospital de Jerez de la Frontera. Los otros dos pasajeros han sido detenidos.
El suceso ocurrió cuando la narcolancha, cargada con estupefacientes, fue detectada a 40 millas de la desembocadura del Guadalquivir. Durante la persecución para interceptarla, la embarcación sufrió un accidente.
Se trata del segundo narco que muere este mes de febrero en incidentes en persecuciones de la Guardia Civil a narcolanchas en la provincia de Cádiz. El pasado sábado, 15 de febrero, era en Almería donde la Guardia Civil grababa una persecución en vídeo como ejemplo de las situaciones a las que se enfrentan los agentes. Es una guerra contra las narcolanchas, una guerra sin fin que no tiene punto y final mientras el negocio de la droga sea tan lucrativo.
Previamente, el pasado 7 de febrero una colisión en aguas de Tarifa entre una patrullera del Servicio Marítimo de la Guardia Civil y una lancha de recreo que transportaba fardos de hachís en aguas del Estrecho también resultó en la muerte de uno de los tripulantes de la embarcación con droga y dejó a otro gravemente herido.