Los funcionarios marroquíes de Aduanas decomisaron este viernes 97 teléfonos móviles y 10 kilogramos de joyas de plata en la frontera con Ceuta. El material estaba en posesión de un marroquí que intentaba entrar a territorio marroquí sin cumplimentar los procedimientos legales, según informa el medio de comunicación marroquí tanja24.com.
Según fuente aduaneras consultadas por la edición digital, los funcionarios en la entrada a Bab Sebta, durante la inspección rutinaria de un vehículo con matrícula española que pretendía acceder a suelo marroquí, hallaron 97 teléfonos móviles “de alta calidad” cuyo valor se sitúa en torno a los 190.000 dírhams (unos 17.600 euros).
La misma fuente dijo que el registro del automóvil también dio como resultado el hallazgo de una cantidad significativa de joyas de plata en distintas formas, con un peso total estimado de unos 10 kilogramos, mientras que el valor financiero en el mercado marroquí llegó a 200.000 dírhams (unos 18.500 euros).
Las autoridades marroquíes señalaron que se incautaron del automóvil así como las mercancías que calificó de contrabando para emprender acciones legales al respecto.
Control de fronteras
Aunque la mayor parte de las intervenciones que desarrollan las fuerzas de seguridad en el lado marroquí de la frontera son golpes al tráfico de sustancias estupefacientes que viajan de Marruecos a Ceuta, la evasión de divisas y pase de productos de lujo sin declarar son otros incumplimientos de la legislación que más se detectan en Bab Sebta.
Los controles rutinarios se mantienen, e incluso se intensifican, en estas fechas del año debido a la Operación Paso de Estrecho (OPE) que multiplica la afluencia de vehículos que utilizan distintos puertos para acceder a Marruecos, donde disfrutan de sus vacaciones de verano.
El trasiego de porteadores encubiertos también añade un riesgo añadido para las autoridades ya que alguno de ellos puede cargar esta mercancía de alto valor. Como publicaba este periódico el pasado fin de semana, cada día cruzan las frontera 19.000 personas.