Entre los tantos vídeos que han circulado por redes sociales tras la entrada de miles de inmigrantes marroquíes en Ceuta destaca sin duda uno. Dura unos pocos segundos, los que tarda un monitor de Cruz Roja en salvar la vida de una bebé que, junto a su madre, estaba al otro lado de la frontera hacinada ante tanta gente. Se llama Mustafa Abdeselam, monitor de Cruz Roja en Ceuta, que se topó con esta tremenda historia a pie de frontera. Historia que comenzó cuando se dio cuenta de que una mujer estaba entre la multitud y muy pegada a la valla sosteniendo a una bebé muy pequeña vestida de rosa y blanco.
Inmediatamente, el joven fue a ayudarlas y logró tomar, a través de un boquete apenas más grande que la niña, a la bebé de solo 2 semanas para luego entregársela a una compañera, también de Cruz Roja, trasladándola a un lugar seguro. De no haber sido por esta rápida actuación, porque se dio cuenta del estado de la pequeña, podría haber habido consecuencias mucho peores. La madre pudo cruzar el Tarajal también y ahora, ambas, están juntas. A las dos de la madrugada se habían reunido sanas y salvas.
Gracias a la intervención de este monitor de Cruz Roja, madre e hija han podido volver a verse apenas una hora y cuarto después de haberse separado en la frontera del Tarajal. Ambas se encuentran en buen estado de salud y les practicaron la prueba del COVID-19, guardando la cuarentena en la nave.
Esta historia, con un buen final a pesar de las circunstancias que la rodean, ha contrastado con todo el caos que se ha tenido que presenciar, incluso sacando a “niños de 2 años de dentro del agua”. Abdeselam, realmente consternado ante lo que está ocurriendo, reaccionó de manera rápida, en un impulso clave para salvar a la pequeña. Esta es una de esas historias con final feliz que se repitieron ayer en la frontera y que han permitido que las tragedias no se repitan demasiado en el tiempo, en unos momentos que son muy críticos para nuestra ciudad.
Los ceutíes han reaccionado positivamente al vídeo de la bebé que fue rescatada por el monitor de Cruz Roja en la valla del Tarajal. Lydia Vázquez, militar y con su esposo trabajando en la Legión, ha sido una de ellas, pues cuando se enteró de la noticia, se interesó inmediatamente por el caso. Es por ello que comenzó a buscar a la madre y a la niña y las pudo encontrar en La Estación del Ferrocarril, cerca de la iglesia.
Cuando vio a la madre sentada en la calle con la pequeña, se ha ofrecido a comprarles comida y cuenta que otras tres personas han tenido un gesto similar para ayudarlas. Ha comentado que “la niña está sana” y que ya se encuentran con el padre.
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