El rey de Marruecos, Mohamed VI, en calidad de presidente del Comité Al Quds --Jerusalén para el mundo árabe--, ha hecho este domingo un llamamiento a formar una "alianza mundial por la tolerancia y la coexistencia" para proteger Jerusalén y su patrimonio cultural.
"Llamamos de nuevo a una alianza mundial de todas las fuerzas vivas unidas en el pacifismo y los valores de tolerancia y convivencia para proteger la Ciudad de la Paz y preservar su patrimonio cultural de toda la Humanidad", ha afirmado el monarca alauí en un mensaje dirigido a la cumbre sobre Jerusalén convocada por la Liga Árabe en El Cairo y recogido por la agencia de noticias oficial marroquí, MAP.
Para Mohamed VI la preocupación por defender Jerusalén "no debe ser coyuntural, sino que debe ser parte de una lógica global que involucre iniciativas diplomáticas de impacto y acciones sobre el terreno realizadas dentro de la propia Ciudad Santa", ha apuntado en su mensaje, leído por el primer ministro marroquí, Aziz Ajanuch.
"Marruecos sigue firmemente convencido de que la causa palestina es una cuestión fundamentalmente política y que, como tal, constituye la piedra angular para un acuerdo duradero y global que traerá paz y estabilidad a la región de Oriente Medio", ha añadido Mohamed VI, para quien la solución de los dos estados sigue siendo una salida justa al conflicto.
Para lograr el "desbloqueo" de esta situación, Rabat ha ofrecido sus "relaciones privilegiadas con todas las partes", en referencia al acuerdo de 2020 por el que Israel y Marruecos establecieron relaciones diplomáticas completas.
Para Mohamed VI, "los extremistas de ambos bandos se están aprovechando unos de otros". "La ruptura de las negociaciones israelo-palestinas y el persistente bloqueo del proceso de paz provoca conflictos, alimenta sensibilidades religiosas y provoca un aumento de las tensiones en la ciudad de Al Quds", ha remachado.
La conferencia sobre Jerusalén se celebra en El Cairo y cuenta con la presencia del rey Abdalá de Jordania; el presidente egipcio, Abdelfatá al Sisi, y el presidente palestino, Mahmud Abbas.