El rey de Marruecos, Mohamed VI, ha anunciado este viernes una ampliación del programa de apoyo social con el objetivo de "combatir la pobreza y la precariedad", así como para mejorar "los índices de desarrollo social y humano", como recoge Europa Press.
"Este apoyo estará destinado a los niños en edad escolar, así como aquellos con discapacidades o recién nacidos; además de las familias necesitadas y en situación precaria, sin hijos en edad escolar, especialmente aquellas que se hacen cargo de personas mayores", ha explicado, según ha recogido la agencia de noticias MAP.
En este sentido, el monarca marroquí ha aseverado durante la apertura de la primera sesión del tercer año legislativo de la XI Legislatura que la implementación del programa se hará "de forma gradual", teniendo "en consideración los fondos asignados".
Por otro lado, Mohamed VI ha recordado nuevamente a las cerca de 3.000 víctimas del terremoto de magnitud 6,8 en la escala abierta de Richter que sacudió Marruecos el pasado 8 de septiembre y que tuvo su epicentro en la provincia de Al Hauz.
"A pesar de la magnitud de la catástrofe, alivia el dolor e infunde orgullo lo que han demostrado los actores de la sociedad civil y la generalidad de los marroquíes, dentro y fuera del país, aportando una sincera asistencia y una solidaridad espontánea con sus hermanos siniestrados.
Comunicado de Mohamed VI
Este es el fragmento del comunicado de Mohamed VI que ha referencia a estas ayudas sociales:
"El rey indicó, en este contexto, que a finales de año se pondrá en funcionamiento el programa de asistencia social directa que permitirá elevar el nivel de vida de las familias beneficiarias, combatir la pobreza y la precariedad y, en definitiva, mejorar Indicadores de desarrollo social y humano.
El soberano subrayó haber "orientado al Gobierno para que este programa se aplique según una visión global y conforme a las disposiciones de la ley marco relativa a la protección social, aprobada por el Parlamento".
Su aplicación, insistió el rey, debe ser un modelo de éxito y, por tanto, debe estar respaldada por el sistema de focalización del Registro Social Unificado (RSU) y aprovechar al máximo la eficacia de las nuevas tecnologías.
El Soberano insistió también en el estricto respeto de los principios de solidaridad, transparencia y equidad en la asignación de las ayudas, en particular en beneficio de quienes las merecen", pidiendo al Gobierno que dé prioridad a la racionalización de los programas de asistencia social existentes y a la garantía de su eficacia así como de la sostenibilidad de los recursos de financiación".