Las minas de cobre de Ceuta, ubicadas en la Calita del Amor (nombre fijado por el arqueólogo José Manuel Pérez Rivera), en el Sarchal, son un tesoro desconocido para muchos ceutíes. Un lugar que, a pesar de su belleza y todo lo que esconde, está abandonado y muy poco explotado.
FaroTV ha hecho una ruta hasta este auténtico tesoro de la mano del geólogo Paco Pereila, quien nos ha contado que, “como muchos de los descubrimientos de las cosas, se produjo por casualidad”. Fue José Manuel Pérez Rivera, “en una de sus escapadas matutinas para ver los amaneceres de Ceuta”, quien acabó llegando aquí y “el primero que vio estos indicios y estos colores verdes que hay sobre las rocas”.
Unos tonos que indican, tras varios estudios, “la presencia de minerales de cobre”, añade Pereila. Según explican en el libro ‘Alidrisia Marina’, “el origen del cobre podría estar relacionado con soluciones hidrotermales postmagmáticas movilizadas posteriormente al sitio de la peridotita. Aunque todavía no se ha podido realizar la identificación mineralógica en el interior de la mina, se espera encontrar sulfatos del tipo halcantita, melanterita o similares, debido a la similitud del afloramiento con otros aparecidos en la provincia de Málaga”.
Para acceder a esta mina de cobre hay que hacerlo a través de una bajada desde la calle Carlos Villón Egea, en el Sarchal, y continuar por una especie de sendero, aunque luego hay que hacer un poco de escalada hasta llegar al epicentro de las minas.
Pérez Rivera fue quien redescubrió este lugar hace unos años, pero hay indicios que indican que fue explotado por otra antigua civilización. Tal y como explica Pereila, “pensamos que esta zona ha sido explotada para sacar cobre. Una explotación muy pequeña porque el sitio no da para mucho mineral”.
Y es que, a través de diferentes estudios de restos arqueológicos que ha hecho el propio José Manuel “se han descubierto pequeñas figuras de cobre y pensamos que en la antigüedad, época musulmana o no se sabe exactamente, también podían haber estado usadas para fabricar munición, ya que el cobre se utilizaba antiguamente para eso, y de ahí pensamos la hipótesis de que a lo mejor los presos del presidio del Hacho también trabajaron en esta zona”, detalla
Además, indica Pereila, “hay justo encima de una de las bocas del túnel un pequeño castillete que se ve en las paredes de las rocas como antiguamente ha habido algunas construcciones y pensamos que se podía utilizar ese castillete para subir parte de ese material que se sacaba desde aquí”.
Estos ceutíes han entrado en más de una ocasión hasta el interior de las minas y también han hecho excursiones para todos aquellos que querían conocerlas en primera persona aprovechando el geolodía, “que es el día con geólogos y hemos traído a todo el que ha querido venir”.
Unas visitas que hace que todos terminen muy fascinados, “porque si ya es sorprendente el entorno que tenemos aquí, ver estas paredes tan verdes y azules y si te metes con la humedad que son unos colores más vivos, a todo el que ha venido le ha llamado la atención”, asegura Pereila.
Además, este geólogo ha querido mandar un mensaje a todos los ceutíes para recordarles la existencia de este tesoro y también pedir un mayor cuidado, ya que se trata de un entorno lleno de belleza pero también de basura. “Entre todos tenemos que cuidarlo evitando desperdicios”, concluye.
Jjj que recuerdos de mi ninez esa Cuevas ya existia era como un santuario donde se hacian rituales y la gente solia ir a pasar el dia
Eso es la Alhama de Sidi Bel3abas, allí las mujeres musulmanas acudían muchos para hacer rituales, llevar velas, hacer rituales de casamiento, para tener hijos, para currar enfermedades, para exsorcismo, etc... Gracias a dios esas prácticas ya no se hacen desde hace muchos años, pero hace más de 40 años era muy comun que la visitaran, el que las guiaba era el Moqadem del Morabito.
Al final de la cueva hay (o había) agua estancada y bastante basura. Lo del agua lo puedo entender pero la basura...
Jajaja,k gracia me hace,descubierto hace unos años dicen,y que fue el primero en ver esos colores jajaka
jajaja lo mismo he pensado yo. Desde que era chico llevo viendo eso. Manda narices.