El Salón del Trono del Palacio de la Asamblea de Ceuta ha acogido este jueves el tradicional homenaje a los maestros y profesores que han alcanzado la jubilación durante este curso académico. Un acto en que también han querido hacer una especial mención a Raju Shivdasani, a quien han recordado no solo por su significativa labor, sino por ser “el hombre de la eterna sonrisa”.
“Homenajear a quienes han dado parte de su vida a todos los demás, a través de la educación”. Por este motivo ha sido convocada esta cita a las 12:00 horas, momento en el que el lugar escogido para la ocasión se ha llenado por completo, no solo de quienes recibirían estos honores, sino también de sus familiares, quienes no han querido perderse este momento.
El acto ha comenzado con unas imágenes que reflejaban parte de la labor desempeñada por todos estos educadores a lo largo de sus años de trabajo. Esto para darle paso a la entrega de la insignia de Magisterio al grupo de docentes de Primaria, por parte de la vicepresidenta primera del Gobierno y consejera de Presidencia y Relaciones Institucionales, Mabel Deu; el vicepresidente segundo y consejero de Educación y Cultura, Carlos Rontomé; y la directora provincial de Educación y Formación Profesional, Yolanda Rodríguez.
La insignia de Magisterio también ha sido entregada al grupo de docentes de Educación Secundaria y del Instituto de Idiomas.
La dedicación y el esfuerzo de grandes maestros
“Damos gracias a Dios por haber conseguido llegar a esta nueva etapa nuestra vida”. En representación del primer grupo, el de las primeras etapas educativas, Mercedes Canca Lara ha tomado la palabra para referirse a la dedicación y al esfuerzo puesto en el “acompañamiento, escucha, testimonio y modelado de los alumnos que nos han llegado curso tras curso durante toda nuestra trayectoria profesional”.
Asimismo, ha querido reiterar la importancia de que “tanto la Educación, como la Sanidad y la Justicia cuenten con un cuerpo propio, independiente del grupo político en el poder”, agregando que “nos encontramos con tantos frentes a los que atender, que no podemos malgastar nuestro tiempo y energías en cambios legislativos que merman nuestro quehacer educativo, en detrimento del acompañamiento fundamental de nuestros alumnos”.
Canca Lara ha querido cerrar con el poema de Gabriel Celaya dedicado al maestro:
Educar es lo mismo / que poner un motor a una barca, / hay que medir, pensar, equilibrar, / y poner todo en marcha.
Pero para eso, / uno tiene que llevar en el alma / un poco de marino, / un poco de pirata, / un poco de poeta, / y un kilo y medio de paciencia concentrada.
Pero es consolador soñar, / mientras uno trabaja, / que esa barca, ese niño / irá muy lejos por el agua.
Soñar que ese navío / llevará nuestra carga de palabras / hacia puertos distantes, hacia islas lejanas.
Soñar que cuando un día / esté durmiendo nuestro propio barco, / en barcos nuevos seguirá nuestra bandera enarbolada.
José Antonio Ruiz Oliva también se ha dirigido a los presentes. Se ha referido a las despedidas, a las jubilaciones y a esos sentimientos que despiertan. “Un sabor dulce, agrio, semidulce”, ha señalado, aunque también ha querido agregar que se trata de un relevo generacional, porque “no podemos quedarnos permanentemente, eso es ley de vida”.
Con Raju en el recuerdo de todos
En su discurso, Ruiz Oliva también ha elogiado la buena voluntad de los docentes y de los propios alumnos para superar con éxito lo que significó la pandemia. Asimismo, ha señalado que actos como los de este jueves “dignifican a las entidades que los promueven, que valoran en su justa medida el papel tan significativo que representamos en la sociedad, para que esta cada día esté más preparada y formada, y por ende sea más feliz”.
No ha querido terminar sus palabras sin antes recordar a Raju Shivdasani y justo al pronunciar su nombre han estallado los aplausos. “Nos dejó hace unos días en la flor de la vida”, ha recordado Ruiz Oliva sobre un docente con un gran legado, “un gran ejemplo a seguir”. “Ha sido una persona íntegra y sensible, comprometida con las enseñanzas del inglés tanto en lo público como en lo privado”.
Amable, extrovertido, simpático, solidario, generoso, trabajador incansable, mejor amigo, mejor compañero. Así era Raju Shivdasani, en las palabras de Ruiz Oliva.
En este acto, Jesús Canca, amigo y compañero de Raju, también ha querido dedicarle unas sentidas palabras, recordándolo como “el hombre de la eterna sonrisa”, pero refiriéndose a él siempre en presente como “un tipo de los que deja huella, sin pisar a nadie, sino todo lo contrario, dispuesto a tender una mano en todo momento”.
“Gracias por todo lo compartido, gracias por ser el hombre de bien del que tanto aprendimos y debemos seguir aprendiendo, gracias por tu derroche de bondad, de amabilidad, respeto, cariño y profesionalismo”. Canca no ha querido decir adiós, sino hasta luego y lo ha hecho con un poema escocés:
“Puedes llorar porque se ha ido o puedes sonreír porque ha vivido; puedes cerrar los ojos y rezar para que vuelva o puedes abrirlos y ver todo lo que ha dejado; tu corazón puede estar vacío porque no lo puedes ver o puede estar lleno del amor que compartes; puedes llorar, cerrar tu mente, sentir el vacío, dar la espalda o puedes hacer lo que le gustaría: sonreír, abrir los ojos, amar y seguir”.
Los docentes homenajeados ahora en una nueva etapa
Por último, el consejero de Educación y Cultura, Carlos Rontomé, ha hablado de este jueves como un día de júbilo, al reconocer “el esfuerzo, la dedicación y el amor por la docencia a lo largo de toda una vida”.
Ha señalado que el modesto acto no solo era de parte de la Ciudad Autónoma de Ceuta, sino también del pueblo de Ceuta para sus maestros y profesores, quienes desempeñan “una de las funciones más importantes que puede desempeñarse en una sociedad, enseñar, educar, abrir las mentes”.
Rontomé le ha dicho a los docentes que estaban frente a él que era tiempo de descanso, pero de un descanso “con la mayor de las recompensas, la satisfacción del trabajo bien hecho, y sobre todo con la certeza de que seguiréis siempre en el recuerdo de los alumnos y alumnas, porque como decía Henry Adams: ‘El maestro deja una huella para la eternidad…’”.
Los docentes jubilados homenajeados durante el acto ha sido los profesores de Educación Primaria: Rosa María Gómez Serra; María del Carmen del Corral Romero; María Rosario Carvajal Cembrano; Luisa Benito Vázquez; Mercedes Canca Lara; José Antonio Ruiz Oliva; Josefina Avila Miguel; Begoña Tellería Domínguez; Carmen Parrado Rubiales; María Victoria Cuadrado Muñoz; María Luisa Alonso Rodríguez. Así como los profesores de Educación Secundaria: Juan Antonio López Narváez: Fernando Cortés Rodríguez; Antonio Jesús Casas Sánchez-Prado; y Carmen Frade Esteban. Igualmente la profesora del Instituto de Idiomas Rosa María Lagares.
Alguno de FP, también se ha jubilado, y no lo han nombrado. Hasta en los actos institucionales, la FP sigue siendo el desagüe o las cloacas del sistema educativo. Vaya tela