No hay San Valentín sin mensajes de cariño. Por eso este 14 de febrero, cumpliéndose la tradición, los
menores acogidos en el
centro de La Esperanza de Ceuta han salido a la calle para, simulando unas barandillas, permitir que los ceutíes dejaran sus mensajes escritos en corazones de cartulina. “La sonrisa es mí pero el motivo eres tú”, se leía en uno de ellos. “Hasta el infinito y más allá”, “te quiero” o “te amo más cada día”.
Cada cual ha plasmado lo que le nace del corazón y lo ha hecho sobre cartulinas. Los menores han usado materiales para simular unas barandillas donde se colgaban los mensajes, colocándolas en pleno centro de Ceuta, en el Paseo del Revellín, ante las puertas del Museo. Algunos de los corazones recogían mensajes genéricos, pero otros venían personalizados con los nombres de las personas a las que iban dirigidos. Los han escrito
jóvenes y no tan jóvenes, también niños que se dirigían a sus madres. Es el día del amor pero también de la amistad, lo que ha quedado reflejado en las barandillas que han terminado llenándose de leyendas.
“Siempre juntos”, “feliz San Valentín”, “a mi maravillosa niña hermosa que tanto quiero” o ‘I love you” se han unido a otros mensajes más propios de la tierra como el “te quiero mucho, como la trucha al trucho”. La importancia no radicaba tanto en lo escrito sino en la participación en un acto que ha sido preparado con mimo por los acogidos en ‘La Esperanza’, contando con las guías e indicaciones de los educadores. Siempre idean acciones distintas, cumpliendo con las distintas tradiciones. Por eso no han querido faltar a esta cita especial con el amor. Y, echando mano de la imaginación, han optado por simular uno de los rincones de los enamorados más famosos en muchas ciudades en donde se colocan candados con esos mensajes. Es una moda que se ha trasladado a Ceuta aunque de otra forma mucho más segura.