Los ministros de Presidencia y Exteriores de España, Félix Bolaños y José Manuel Albares, han firmado un acuerdo de colaboración para recuperar la Memoria Democrática vinculada con el exilio republicano español, en países como Marruecos, en el marco de la Ley de Memoria Democrática.
El objetivo del acuerdo es desarrollar un conjunto de medidas para garantizar el reconocimiento y la reparación de las víctimas en el exterior de la guerra civil y la dictadura, ha informado el Ministerio de Presidencia, Relaciones con las Cortes y Memoria Democrática mediante un comunicado.
Los ministros han acordado coordinar y financiar actividades en embajadas y oficinas consulares de España en Estados Unidos, México, Chile, Argentina, Puerto Rico, Marruecos, Argelia, Túnez, Francia, Bélgica, Alemania, Suecia y Austria.
Entre ellas, se incluyen los actos de conmemoración del 8 de mayo, día de recuerdo y homenaje a las víctimas del exilio; trabajos y actividades conmemorativas en torno a lugares de memoria; reuniones con las asociaciones memorialistas del exilio y acciones de investigación, divulgación y digitalización.
Actividad consular
La asistencia consular incluye realizar gestiones ante las autoridades policiales y penitenciarias del país, asegurar condiciones aceptables para su estado de salud, intermediar con los familiares para que puedan mantenerse en contacto y efectuar visitas consulares periódicas.
Los consulados españoles en el exterior atendieron 7.200 casos de emergencias colectivas e individuales a lo largo de 2022, prácticamente el doble que el año anterior (un 98,5 por ciento más), ha adelantado la ministra Portavoz, Isabel Rodríguez, en rueda de prensa.
Estas instituciones prestan apoyo y asistencia a los españoles detenidos en otros países, de los que, en 2022, había 894, un 13 por ciento más que en 2021. Son 788 hombres y 106 mujeres, la mayoría de ellos en centros penitenciarios de Francia, Alemania y Marruecos.
Además de las labores de emergencia, los consulados atienden diariamente a cerca de 3 millones de ciudadanos españoles inscritos como residentes en el exterior, un colectivo que se ha duplicado desde el año 2009.