Una veloz carrera que parte desde uno de los puestos de vigilancia en la playa de la Ribera, en Ceuta, alerta que algo inusual ocurre a quienes acudieron allí este lunes. El rescatista, que ha avistado una petición de auxilio desde el mar, alcanza la orilla rápidamente y se lanza al agua donde un hombre da manotazos al aire pidiendo ayuda.
De este modo ha iniciado el simulacro anual que organiza Obimasa, organismo dependiente de la Consejería de Medio Ambiente y Servicios Urbanos de la Ciudad, y ejecutado por el personal de vigilancia y socorrismo de Marsave, y con el que se busca evaluar y preservar los estándares de calidad en la atención y servicios prestados en las playas ceutíes.
Víctor Ríos, director general de Emergencias y Protección Civil, ha explicado a los asistentes los ejercicios a realizarse, informando que uno de ellos se debió suspender por la presencia de un banco de medusas en la playa y que a pesar de las labores de extracción que se realizaban no se consideró procedente poner en riesgo al personal de rescatismo.
Ríos ha destacado que en reales circunstancias de emergencia los rescatistas no dudarían ni un momento lanzarse al agua a pesar de las medusas, pero que no tenía sentido someterlos al riesgo en un simulacro.
Esas mismas condiciones han impedido uno de los simulacros a realizarse, que implicaba la utilización de una embarcación de uso recreativo a 200 metros de la orilla de la playa y que suponía para los rescatistas en tierra nadar hasta ella, con el consiguiente riesgo de picadura de medusas.
“Las condiciones no nos han permitido hacer el ejercicio que teníamos previsto, entonces vamos a hacer dos ejercicios, para valorar la calidad y los tiempos de respuesta en los servicios de salvamento que tenemos aquí en la playa”, ha señalado Ríos
La segunda prueba ha consistido en medir el tiempo de respuesta de los socorristas encargados de llegar en una moto de agua ubicada en el extremo izquierdo de la playa de la Ribera, y que debían correr hasta ella abordarla y llegar hasta la playa de Los Chorrillos en menos de cuatro minutos.
El inicio de la actividad se ha visto retrasado por la llegada del banco de medusas a la playa de la Ribera, donde Rafael Mora, Supervisor del Puesto Bravo 1 de Salvamento y Socorrismo en Ribera ha hecho una serie de recomendaciones a quienes allí acuden a disfrutar del verano, destacando que la presencia de estos invertebrados marinos obligó a la colocación de la bandera amarilla, para que los usuarios estuviera alertas sobre los riesgos que corren.
“hay que bañarse con precaución, en este caso también hemos puesto la bandera de las medusas, por lo que la precaución es lo primero. Si veis que se pone la bandera amarilla por cualquier causa la recomendación es mirar que no hay medusas alrededor y que no se vayan muy alejados de la orilla”, ha señalado.
En caso de ser picado por una medusa puede dirigirse al Puesto de Salvamento donde le lavarán el área con una solución de agua y bicarbonato para neutralizar el veneno y aplicarán hielo en caso de haber inflamación. Luego de eso la recomendación es no ducharse con agua dulce por al menos un par de horas porque eso puede reactivar la acción de la toxina de la medusa.
Las recomendaciones para quienes acudan a la de la Ribera y las demás playas de Ceuta es a ser prudentes y estar atentos a los anuncios de seguridad, como el cambio de banderas, ya que el incumplimiento de las restricciones que impone una bandera roja acarrea multas.