Casi tres kilos pesaba la medusa gigante que ha encontrado Yusef, junto a otros amigos, esta mañana en la playa del Tarajal. Este vecino de Ceuta ha decidido sacarla de entre las piedras, donde se había quedado atrapada para evitar que los niños que por allí juegan o cualquier otra persona acabará siendo picada por tocarla sin querer.
Rondaban las diez de la mañana, cuando los hijos del amigo con el que Yusef ha ido a la playa, les avisaron de que habían visto una medusa enorme atrapada entre las rocas. Estos, lejos de asustarse, estaban encantados con la aventura del hallazgo. Y por ello, para evitar que los niños se pusieran a tocar al animal marino o picara a cualquier otra persona que andaba por ahí, Yusef decidió sacarla de ahí.
Cuenta que usaron para ello una red metálica que tenían a mano para llevarla hasta la orilla, hacer un agujero en la arena y taparla.
Este ejemplar que han encontrado los ceutíes en la playa del Tarajal, podría pertenecer a la especie de 'Rhizostoma luteum', más conocida como la medusa 'gigante', por su gran tamaño y peso. Este tipo de medusas pueden llegar a medir hasta 60 centímetros y alcanzar un peso de 40 kilos. Sus avistamientos eran tan contados que, tras catalogarla dos científicos franceses en 1827, muchos colegas dudaron de su existencia.
En Ceuta fueron vistas por última vez hace casi dos años, en octubre de 2019. Fueron los voluntarios del Centro de Estudios y Conservación de Animales Marinos (CECAM) de Ceuta en aguas próximas a la barriada del Sarchal quienes vieron al ejemplar en cuestión.
El ejemplar 'ceutí' encontrado, de un tamaño considerable, nadaba cerca de la costa cuando varios miembros del CECAM han dado con él, tomando imágenes de la efeméride, puesto que si bien se había constatado la presencia de estas enormes medusas en costas murcianas, almerienses, granadinas o malagueñas, no había registros de que uno de estos ejemplares hubiese pasado por Ceuta.
Aún así, y para tranquilidad de los bañistas y personas que se acercan hasta las playas de Ceuta, la picadura de estos animales marinos, y a pesar de su tamaño, causa apenas una leve irritación. Aunque sus largos tentáculos, que pueden alcanzar los dos metros, aumentan la posibilidad picaduras.
No sé cómo a día de hoy seguimos siendo así la especie humana… esa medusa lo último que hay que hacer es sacarla del agua, lo correcto es devolverla de la mejor manera posible a su hábitat…dejemos ya de destrozarlo todo a nuestro paso por favor, que Ceuta es una ciudad europea que debería de tener ya toda la información disponible para actuar de una manera respetuosa y sostenible con su entorno