La delegada del Gobierno en Ceuta, Salvadora Mateos, ha “lamentado” este miércoles el “revuelo” generado por la “malinterpretación” de sus palabras “coloquiales” del pasado viernes, cuando en una rueda de prensa se refirió como “las muchachas” a las
trabajadoras transfronterizas marroquíes que por miles trabajaban en la ciudad autónoma hasta el cierre de la frontera. “Es un lenguaje que se utiliza mucho aquí y en Andalucía, pero al parecer ha sido malinterpretado, ya que jamás lo hice de forma despectiva”, ha remarcado antes de pedir “disculpas a quien se pueda haber sentido ofendido”.
En declaraciones a los medios, la política socialista ha recordado que “a lo largo de toda mi trayectoria profesional y política he luchado por la dignidad y el trabajo que desempeñan las mujeres a uno y otro lado de la frontera y desde mis distintos puestos de responsabilidad he promovido la regularización y el acceso de las trabajadoras transfronterizas a condiciones laborales iguales a las de esta ciudad”. “Las palabras son fuentes de malentendido y a veces de manipulaciones”, ha criticado Mateos, que ha subrayado que en 1995 creó, como consejera de Bienestar Social del Ejecutivo local, “el primer grupo local de formación de limpiadoras de hogar con los Hermanos Franciscanos de la
Cruz Blanca”. “Empezamos con 15 y hoy son 300 anticipándonos a la actual Ley de Dependencia y después como jefa de la Oficina de Extranjeros promoví la regularización de las mujeres dedicadas al servicio doméstico”, ha añadido. “Siempre he procurado luchar por el trabajo de las
mujeres y que el otro día utilizase una palabra coloquial ha hecho que se desvirtúe la labor que llevo desarrollando durante tanto tiempo”, ha concluido la delegada.
El origen de la polémica
El viernes de la semana pasada, durante su presentación de las medidas incluidas en el plan de choque del Gobierno central para hacer frente a las consecuencias de la invasión de Ucrania, la delegada, al ser preguntada por las condiciones en las que se podría reabrir el
paso del Tarajal, insistió en que se prevé dar prioridad en un restablecimiento progresivo del tránsito entre la ciudad y
Marruecos a los trabajadores transfronterizos. “Mantengo, como he dicho desde el primer momento, que serán los primeros que podrán pasar... El día que se abra la frontera entrarán los que cumplieron con su deber de irse a Marruecos para venir a gestionar su documentación y si no es el primero el segundo, los que se quedaron aquí... A ver, en Ceuta sobre todo las amas de casa estamos deseando que vengan las muchachas”, añadió Mateos. La delegada ejemplificó ese interés en primera persona: “Te lo digo empezando por mí, que estar trabajando aquí por la mañana y estar de limpieza por la tarde la verdad es que cuesta”, comentó con una sonrisa antes de tildar de “necesaria” para reabrir la frontera una reforma del marco en el que los nacionales del país vecino pueden pedir asilo en la ciudad.