Por tercera vez se lleva a una sesión plenaria el debate sobre la futura ley de reforma de la Administración Local y fue en esta ocasión de manos de los socialistas, quienes dejaron de manera clara que desde su punto de vista estaban en peligro numerosos servicios fundamentales que han de atender los ayuntamientos. Fue el consejero de Hacienda, Guillermo Martínez, quien acusó a Carracao de que se le había olvidado adecuar esa propuesta que había recibido de Madrid directamente a nuestra ciudad y además le pidió que le dijera en qué punto de ese proyecto de ley se habla por algún lado de que la intención que existe, indudablemente, es la desaparición de los servicios sociales y de los educativos.
Puntos esenciales
Le repitió cuáles eran los cuatro puntos esenciales de la reforma que se aprobará en el mes de abril y que se centra, por un lado, en evitar duplicidades, de manera que una competencia y una administración; que se intensifiquen los controles presupuestarios; que se reduzcan los altos cargos y que se agilicen los trámites administrativos para las empresas y emprendedores. Preguntándole si estaba en contra de esos objetivos.