Las fuerzas marroquíes han impedido la entrada de un grupo de nadadores que pretendía su acceso a
Ceuta bordeando el espigón de Benzú. A diferencia de los últimos intentos llevados a cabo, todos por Tarajal, esta noche han variado el punto elegido para escapar del país y llegar hasta nuestra ciudad. Y lo han hecho aprovechando el momento de la ruptura del ayuno, confiando en que la vigilancia iba a ser mucho menor. No consta que hayan conseguido entrar ya que, tal y como se aprecia en las grabaciones efectuadas en el mismo momento y facilitadas a FaroTV, han salido embarcaciones de
Marruecos para frenar esa salida.
Los jóvenes se han arrojado al agua y han intentado emprender ruta hacia Ceuta. En el lado del espigón de Benzú se posicionaban las patrullas de la
Guardia Civil de servicio por si era necesaria su intervención. Varias unidades del vecino país han impedido que los nadadores siguieran con esa ruta. Y esta situación se suma a lo que sucedió este mismo lunes durante, prácticamente, toda la jornada pero de manera más dura en la tarde y noche. Fueron los momentos elegidos para que grupos de marroquíes intentaran no solo la entrada por mar sino, también, por el monte. Todos los pases fueron abortados por las fuerzas de seguridad. Este caso se produce en el mismo día en el que se ha llevado a cabo el inicio del proceso de devoluciones que pretende sacar
a los casi 100 adultos que consiguieron su entrada en Ceuta el pasado fin de semana, sobre todo el domingo. Las gestiones comenzaron después de conversaciones entre ambos países y tras las conversaciones mantenidas desde la propia Delegación del Gobierno. A pesar de ese impacto, el efecto llamada continúa porque lo que quieren los marroquíes es salir como sea de un país en el que no encuentran alternativas.