Un año más, mañana, viernes día 17, celebramos el aniversario de la ESPAÑOLIDAD de este trozo de ESPAÑA situado en el Norte de África, cumpliéndose en esta ocasión 513 años de su integración a la Corona de aquel reinado que envió a Don Pedro de Estopiñán y Virué. Para su conquista, formando parte desde entonces de una Nación siempre humanitaria; caritativa y leal con quienes la necesitaron, lo que aún continúan haciendo en gran parte del Mundo.
Melilla, aunque todavía hay quienes lo ponen en duda por sus ambiciones anexionistas, es España 18 años antes de que Navarra se incorporara a la Corona de Castilla, 162 años antes de el Rosellón fuera franceses; 279 años antes de que existieran los EEUU de América, y muchísimos años antes de que existiera el sultanato de Marruecos…
Por dicha efemérides, y ante el monumento al conquistador de esta ciudad D. Pedro de Estopiñán, tendrán lugar los actos programados por el Gobierno de la Ciudad y al que asistirán las autoridades de la Plaza, delegado del Gobierno, de la Comandancia Militar, delegados provincionales, representaciones culturales y religiosas, políticos, etc., aunque un año más, brillarán por su ausencia los que opinan que los melillenses celebramos un ‘acto de sangre’. Allá ellos…
Hemos celebrado días atrás los tradicionales festejos en Honor de Nuestra Excelsa Patrona que, pese a lo que opinen los disconformes de siempre, han constituido un señalado éxito porque la afluencia de melillenses no ha podido ser más numerosa. El día 8, festividad de la Virgen de la Victoria, su desfile procesional no ha podido verse más arropado porque desde su salida del templo parroquial y por cuantas calles pasó, especialmente por la Avenida Juan Carlos, la imagen se vio acompañada de centeneras y centenares de ciudadanos de todas las edades.
Pues ahora nos llega la celebración del Día de Melilla, cuya fecha también algunos quieren cambiarla, como más arriba digo, porque estiman que recordamos en ella un ‘acto de sangre’.
Tal vez en esta ocasión, más que nunca, Melilla entera debe hacer acto de presencia en los actos programados para celebrar la conmemoración del 513 aniversario de nuestra ESPAÑOLIDAD. No debe faltar ningún melillense que pueda hacerlo. Mejor dejar constancia con su presencia de que Melilla es parte integrante de España como lo son Málaga, Almería, Madrid, Cataluña, etc., etc., demostrándole a ese diputado de Ezquerra Republicana que, no hace muchas fechas, por lo ocurrido en el paso fronterizo de Beni-Enzar dijo que se hiciera un referéndum para saber “si queríamos ser españoles o marroquíes”. ¡Qué los melillenses somos ESPAÑOLES hasta después de muertos!
Y no solo al separatista republicano, si no a cuantos pretenden que Melilla pase a formar parte de un País que aún no existía cuando Melilla era ya parte integrante de España.
Mañana, en ese acto que se va a celebrar el aniversario de la españolidad de Melilla ante el monumento de D. Pedro de Estopiñán, debe falta sitio para dar cabida a todos los melillenses que allí debemos estar acompañando a nuestras autoridades y en homenaje a quien conquistó esta ciudad para la Corona de España.
Melilla, aunque todavía hay quienes lo ponen en duda por sus ambiciones anexionistas, es España 18 años antes de que Navarra se incorporara a la Corona de Castilla, 162 años antes de el Rosellón fuera franceses; 279 años antes de que existieran los EEUU de América, y muchísimos años antes de que existiera el sultanato de Marruecos…
Por dicha efemérides, y ante el monumento al conquistador de esta ciudad D. Pedro de Estopiñán, tendrán lugar los actos programados por el Gobierno de la Ciudad y al que asistirán las autoridades de la Plaza, delegado del Gobierno, de la Comandancia Militar, delegados provincionales, representaciones culturales y religiosas, políticos, etc., aunque un año más, brillarán por su ausencia los que opinan que los melillenses celebramos un ‘acto de sangre’. Allá ellos…
Hemos celebrado días atrás los tradicionales festejos en Honor de Nuestra Excelsa Patrona que, pese a lo que opinen los disconformes de siempre, han constituido un señalado éxito porque la afluencia de melillenses no ha podido ser más numerosa. El día 8, festividad de la Virgen de la Victoria, su desfile procesional no ha podido verse más arropado porque desde su salida del templo parroquial y por cuantas calles pasó, especialmente por la Avenida Juan Carlos, la imagen se vio acompañada de centeneras y centenares de ciudadanos de todas las edades.
Pues ahora nos llega la celebración del Día de Melilla, cuya fecha también algunos quieren cambiarla, como más arriba digo, porque estiman que recordamos en ella un ‘acto de sangre’.
Tal vez en esta ocasión, más que nunca, Melilla entera debe hacer acto de presencia en los actos programados para celebrar la conmemoración del 513 aniversario de nuestra ESPAÑOLIDAD. No debe faltar ningún melillense que pueda hacerlo. Mejor dejar constancia con su presencia de que Melilla es parte integrante de España como lo son Málaga, Almería, Madrid, Cataluña, etc., etc., demostrándole a ese diputado de Ezquerra Republicana que, no hace muchas fechas, por lo ocurrido en el paso fronterizo de Beni-Enzar dijo que se hiciera un referéndum para saber “si queríamos ser españoles o marroquíes”. ¡Qué los melillenses somos ESPAÑOLES hasta después de muertos!
Y no solo al separatista republicano, si no a cuantos pretenden que Melilla pase a formar parte de un País que aún no existía cuando Melilla era ya parte integrante de España.
Mañana, en ese acto que se va a celebrar el aniversario de la españolidad de Melilla ante el monumento de D. Pedro de Estopiñán, debe falta sitio para dar cabida a todos los melillenses que allí debemos estar acompañando a nuestras autoridades y en homenaje a quien conquistó esta ciudad para la Corona de España.
