Una vecina de Juan Carlos I ha contactado con El Faro de Ceuta porque una avería está provocando que desde hace meses malviva en su propia casa "por culpa" de la falta de colaboración de "la vecina de arriba".
"Se nos ha caído el techo de la cocina encima, vivimos en muy malas condiciones, me están saliendo hasta cucarachas... De todo", explica esta mujer que vive en el portón 39 de la barriada con su hijo pequeño, su pareja y dos gatos.
"No se puede picar ahí porque es hormigón, hay que hacerlo desde la casa de esa señora y ella que no quiere y que no quiere. Estoy viviendo como una pordiosera en mi propia propiedad, un bajo "con cédula de habitabilidad y todos los papeles", asegura esta madre que solo pide cooperación para reparar la avería.
Ya han pasado por allí tres fontaneros, calcula, a los que ha tenido que pagar solo por la visita y todos concluyen lo mismo: no pueden empezar a trabajar porque la fontanería está en su casa, no en el bajo. "Además, lo que los vecinos dicen, que no es una avería del portón, sino privada, de su casa", reitera.
Según el atestado de Bomberos proporcionado por la afectada, la caída de parte del falso techo de escayola de la cocina se debe a filtraciones de agua que ella etiqueta como "fecales, de pipí y de popó". En estos momentos, indica, se encuentran a la espera de unas segundas diligencias por parte del Servicio de Extinción de Incendios y Salvamento (SEIS) de Ceuta .
Tras el desprendimiento del techo siente que su familia y ella misma se encuentra "en peligro: Puede haber una muerte y, ¿qué pasa? ¿Me llevan a Santa Catalina y ya está?", dice molesta por las condiciones en las que viven desde hace meses.
A consecuencia del derrumbe, "se me ha roto toda la cocina: el butano entero, casi todo está abollado...", describe esta vecina el panorama en el que se encuentra su casa. "Tengo que estar secando alfombras cada dos por tres porque se me forma una piscina, sacar escombros... Ahora llega el invierno y el agua seguirá cayendo si nadie me da una solución", vaticina la perjudicada.
Debido a la situación de urgencia que padece, Luna Blanca le da alimento y, aparte, ha solicitado la ayuda de la Consejería de Servicios Sociales.
Esta vecina de Juan Carlos I, quien destaca que paga religiosamente su catastro y alcantarillado, lamenta que esta persona y sus familiares –hijos y nietos– "se nieguen rotundamente a arreglarlo porque ella ya reparó su baño; que lo siente mucho por mí pero que me busque la vida como pueda".
Al no percibir "algo de bondad" por parte de su vecina para poner fin a este sufrimiento, sopesa acudir a los tribunales.
La afectada quiere reiterar que vive en el portón 39 de la barriada Juan Carlos I y que su vecina "no quiere arreglar la avería". Quien se declara perjudicada por esta situación ha llevado a fontaneros y, pese a todo, "la señora no quiere picar porque ha arreglado su cuarto de baño hace poco".
Según explica la propietaria del bajo, le dice que hable con su hijo, que es el presidente de la comunidad de vecinos, y que esta persona le dice lo mismo.
"Debido a esto se me rompió toda la cocina y tuve que ir a la asistenta social para que me ayudase ya que ellos no quieren arreglarme esa avería. A cada fontanero que ha venido le he tenido que pagar las visitas", manifiesta la afectada.
"Al principio hablé con mi vecina y ella sigue con que no quiere picar, que quiere una máquina especial que ella no rompe su baño, y que yo sigo malviviendo con sus aguas fecales. Es imposible dialogar con ella, siendo culpa de esta señora", afirma la perjudicada.
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