Las obras de remodelación de la Marina están prácticamente concluidas, al menos en superficie. Gran parte del paseo está ya abierto al público, al igual que también lo está desde hace any la nueva pasarela que peatonal que conecta con la entrada principal al Parque Marítimo del Mediterráneo.
Los trabajos, argumentados desde el Gobierno de la Ciudad en la sentencia judicial que condenaba a la administración local a impermeabilizar la cubierta del paseo debido a las filtraciones a los garajes del piso inferior, se han prolongado durante el último año y han supuesto la remodelación, más o menos completa del entorno.
El Paseo de la Marina es hoy mucho más diáfano y cuenta, por ejemplo, con dos amplias zonas de juego infantil de las que antes no disponía. Goza de una nueva iluminación, luminarias que también han sido objeto de crítica en algunos casos por los ciudadanos, pero que consumen mucho menos, con el consiguiente ahorro energético que ello supone para las arcas municipales.
El grado de satisfacción , en general, de los ciudadanos sobre esta remodelación, que ha sido objeto de polémica durante gran parte de la legislatura anterior, es bastante alto. No obstante, y pese a que los trabajos aún no pueden darse por finalizados, según reitera la consejera de Fomento en funciones, Susana Román, ya han surgido algunas críticas, sobre todo, de aquellos que tienen plazas de aparcamiento, en propiedad o alquiler, en alguno de los dos niveles de garaje que se encuentran bajo el paseo.
Y es que el proyecto siempre ha incluido la eliminación de los 'vomitorios' por los que, desde la Marina, se accedía tanto al interior de estos garajes como a la avenida Compañía del Mar. Con la construcción de la pasarela peatonal y su apertura, esos accesos han desaparecido del paseo. Los conductores deben entrar al garaje, provisionalmente, descendiendo desde la pasarela hasta la entrada junto Parque Marítimo. Un acceso que ya ha despertado algunas críticas por su nula iluminación, -está completamente a oscuras- y por la inseguridad que ello genera a quien debe acceder por este punto, para recoger su vehículo. El arquitecto de la Consejería de Fomento y director del proyecto, Jorge Chaves, quita hierro a estas críticas, "puesto que se está construyendo un nuevo acceso en superficie en el Paseo de la Marina y mientras los usuarios de los garajes solo tienen que andar un poco más", añade para recordar que a las obras, "aunque les falta poco" no están terminadas "ni rematadas". Industria, por otra parte, tiene en previsión la remodelación de todo el alumbrado público en la avenida Compañía de Mar, por lo que desde la Ciudad se entiende que la iluminación mejorará ostensiblemente en cuestión de poco tiempo. Recuerda además Chaves que la eliminación de los tres 'vomitorios' se realizó, entre otras razones, precisamente por seguridad, "porque se habían producido varios atracos" y también por higiene, ya que a estar también poco iluminados, había quien aprovechaba para orinar y defecar. "Ahora con la pasarela el acceso es mucho más diáfano y pueden llegar con mucha más facilidad hasta el Parque las personas con discapacidad", subraya.
Tampoco el remate de la pasarela peatonal parece concitar la unanimidad de los ciudadanos. Hay quienes critican que su entronque con la entrada principal al Parque Marítimo ha 'roto' la estética de la obra póstuma de César Manrique y así llaman la atención a los políticos a través de las redes sociales. donde también hay quienes intuyen que la base del puente será un lugar poco higiénico y difícil de limpiar de la suciedad que allí se acumule. Arriba, todos son luces. Abajo, parece que sigue habiendo demasiadas sombras.