Conocidos y amigos recuerdan a los pequeños, quienes frecuentaban el domicilio de su abuela en calle Canalejas pero residían en Alfau. La ex pareja tiene una tercera hija de unos nueve años que no estaba en el vehículo.
La calle Canalejas era, desde hace unos meses, la zona de juegos de los hermanos fallecidos trágicamente este viernes en el Muelle de España. Los vecinos no ocultan su conmoción al conocer qué ocurrió aquella noche: el vehículo en el que se encontraba los pequeños Naira e Ilias, de cuatro y cinco años respectivamente, además de su madre, se precipitó al mar cuando admiraban el buque ‘Rohne’ por causas que aún se desconocen. Ella pudo salvar la vida pero los pequeños murieron ahogados por asfixia atrapados en el interior del turismo.
La información sobre esta tragedia irrumpió en las calles desde primera hora de la mañana de ayer y todos los ciudadanos expresaron su pésame por el accidente sucedido. Quienes mayor contacto tenían con los menores, aparte de sus familiares, eran de su entorno más próximo, es decir, calle Canalejas y Plaza Azcárate. “Los dos eran muy simpáticos: Naira graciosa y tímida e Ilias muy despierto”, comentó una de estas personas.
Aunque su residencia se encuentra en los bloques de Alfau, los niños pasaban gran parte del día en el domicilio de su abuela en Canalejas. “Ella está fatal, igual que el tío, quien estaba muy volcado en sus tres sobrinos desde la separación”, explicó un amigo de la familia, quien indicó que la ex pareja tiene un tercer hijo, una niña de unos nueve años.
“Anoche -en referencia al viernes- los dos iban a comprar el pan poco antes de que cerrara el supermercado de su calle”, recordó uno de los vecinos; “los pobres se tuvieron que marchar sin el pan porque ya no quedaba”. Según el testimonio de sus conocidos, la madre acudía con los pequeños para comprar en este establecimiento a mediodía y por la tarde-noche.
La muestra del cariño que despiertan los pequeños quedó patente ayer cuando numerosas personas acudieron al hogar de la abuela para trasladar sus condolencias por una pérdida que todos coincidieron en que es “irreparable”. El velatorio tuvo lugar en el Poblado de Regulares, según informaron a este periódico, donde vive el progenitor, aunque los restos mortales se depositaron previamente en el domicilio de calle Canalejas.
Nadia Abdeselam Ahmed, la madre de los fallecidos, continuaba ingresada en el Hospital Universitario del Instituto Nacional de Gestión Sanitaria, Ingesa, al cierre de esta edición. Sin embargo, el padre fue dado de alta en el clínico pese a las atenciones que requirió una vez conoció que sus hijos se encontraban atrapados en el vehículo bajo el agua.
Las autoridades, tanto de la administración autonómica como de la general, en todos los niveles de responsabilidad, se interesaron por el estado de la familia y expresaron su pésame por la pérdida de los dos pequeños.
Autopsia
Según los datos de la autopsia practicada a los dos menores, el fallecimiento se produjo por asfixia a causa de la inmersión prolongada de ambos en el mar.
Entierro
Los difuntos, de religión musulmana, serán enterrados en la jornada de hoy en el cementerio de Sidi Embarek, mezquita en la que se realizarán las plegarias por los dos pequeños a mediodía.
Beatriz de Silva
La jefa de estudios del Centro de Educación Infantil y de Primaria Beatriz de Silva comunicó ayer que los menores fallecidos son alumnos de nivel de Educación Infantil de cuatro años, en concreto, la clase A. Los pequeños estaban en la misma clase porque cumplen años a principio y final del ejercicio. La Dirección y la Jefatura de Estudios, cuyos representantes acudieron al velatorio, tienen previsto organizar un acto para esta semana.