El máximo responsable de Emvicesa asegura que “todas las incidencias están siendo atendidas” y explicó que el problema podía ser que “hay muchas y eso lleva tiempo”.
El gerente de la empresa pública de vivienda de Ceuta (Emvicesa), Antonio López, aseguró ayer a ‘El Faro’ estar “sorprendido” por las demandas de los vecinos de Loma Colmenar que en los últimos días se habían hecho públicas. Según explicó “no tengo conocimiento de algunas de las cuestiones denunciadas en los medios y me extraña porque estamos atendiendo todos los partes de incidencia que nos van llegando”. En este sentido aseguró que cada una de las reclamaciones que están llegando a las oficinas de la empresa municipal se están gestionando del mismo modo: trasladándolas a la empresa que se encargó de la construcción de las viviendas, ya que los inmuebles se encuentran todavía en garantía por el escaso tiempo transcurrido desde su entrega. Además, el propio Antonio López aseguró que “todas las incidencias se van a subsanar”, aunque admitió que “si hay muchas se alarga el tiempo de espera para atender a cada una de ellas, pero eso no significa que no vayamos a atenderlas”.
Respecto a las deficiencias denunciadas por la asociación de vecinos, López restó importancia a las mismas explicando que “cuando se entregan promociones nuevas siempre hay cosas que pulir y algunas cuestiones que arreglar, pero es normal y en este caso también está siendo así”.
Por tanto el gerente de la empresa pública Emvicesa confirmó que las peticiones de los vecinos serán atendidas cuando les llegue el turno y quitó importancia a algunas de las cuestiones asegurando que son las normales en estos casos.
La actuación en la barriada Miramar Alto, una prioridad
Antonio López explicó que la actuación sobre los arcos de los edificios de Miramar Alto, que se encuentran muy deteriorados, se está estudiando y valorando actualmente. El gerente de Emvicesa reiteró su compromiso de retirarlos y aseguró que lo ideal sería hacerlo en septiembre para que se realizara antes de la llegada de las lluvias.
López incidió en el hecho de que es responsabilidad de la comunidad de propietarios hacerse cargo de la retirada de los arcos y que, “de forma extraordinaria y como colaboración con los vecinos”, se iba a hacer esta gestión.
La idea de realizar esta actuación en el mes de septiembre parte de la necesidad de impermeabilizar la zona sobre la que se ubican los arcos. Actuación ésta que no se podría llevar a cabo mientras se encontrara lloviendo.