Los centros
educativos de Ceuta publicarán mañana las listas provisionales de admitidos de primera preferencia y de solicitudes excluidas en el proceso ordinario de
escolarización para el próximo curso, que incluye 1.088 vacantes en Infantil de 3 años y otras 49 para alumnos con necesidades educativas especiales. El viernes se abrirá un plazo para la presentación de reclamaciones que se extenderá hasta el martes, 9 de junio, y al día siguiente se darán a conocer las listas definitivas de admitidos, excluidos y renuncias, con lo que comenzarán las actuaciones del procedimiento extraordinario.
Para el lunes de la semana siguiente, 15 de junio, está programada la publicación por parte del Servicio de Inspección del listado provisional de adjudicaciones y de las vacantes resultantes tras las adjudicaciones de centros. Acto seguido, del martes 16 al jueves 18, se abrirá otro plazo de tres días para la presentación de reclamaciones y renuncias y de solicitudes complementarias por parte de los alumnos sin adjudicaciones.
Solo uno de cada tres centros tiene entorno virtual para familias
Casi un 16% de los centros educativos no universitarios de la ciudad no cuentan con un entorno virtual para el aprendizaje del alumnado, aunque en regiones como Navarra y Asturias ese porcentaje supera el 30%, según alerta un informe de
FECCOO sobre las necesidades y carencias del sistema educativo para afrontar el próximo curso con la amenaza del
coronavirus. Por otro lado, apenas el 30% de los centros educativos ceutíes cuenta con un entorno virtual accesible a las familias del alumnado, porcentaje que desciende al 13,3% y al 14,9% en Canarias y Asturias, respectivamente.
Solo el 4,2% (el 21,7% de media estatal) de los colegios e IES de la ciudad tienen servicios en la nube a los que pueden acceder las familias. El 58,3% carece de herramientas en la nube a los que puedan acceder el alumnado.
FECCOO ha alertado de que el curso 2020-2021, “en el que es previsible que haya que compatibilizar la educación presencial y en línea”, plantea “enormes retos que exigirán incrementar las plantillas docentes y de otros perfiles profesionales, dotar de medios tecnológicos adecuados al profesorado, a los centros y al alumnado que lo precise para paliar la brecha digital, y dimensionar las plataformas digitales existentes para que puedan atender los nuevos y crecientes requerimientos”.