Ubicado en la parcela K, en Fuerte Mendizábal, servirá para la acogida de los MENA cuyo número ya alcanza los 200
La consejera de Sanidad, Adela Nieto, ya avanzó en la última sesión plenaria que en breve se darían los primeros pasos para que el futuro centro de menores sea una realidad, permitiendo que la actual infraestructura sirva a la Policía Nacional de sede para la Jefatura. Pues bien, ya se ha sacado a licitación un contrato menor de 18.000 euros para la redacción del estudio geotécnico necesario para el proyecto de ejecución de ese centro, que estará ubicado en la parcela K, al lado de la cárcel de Fuerte Mendizábal. Según consta en la documentación publicada por la Ciudad en su página de contratación, el presupuesto asciende a casi 15.000 euros y el plazo máximo para ejecutar el informe es de un mes.
El futuro centro de menores se organizará en distintos módulos, contará con garaje y dos plantas además de cinco módulos de alojamientos. La superficie total construida es de 3.051 metros cuadrados y dispondrá de una pista deportiva polifuncional de 300 metros cuadrados al aire libre. Se contempla la urbanización del camino de acceso con alumbrado público viario y conexión con la carretera de García Aldave y Benzú.
La licitación del informe geotécnico permitirá conocer el terreno y saber qué tipo de actuaciones se pueden llevar a cabo sobre el mismo. En la actualidad la parcela sobre la que se va a trabajar es una zona que está sin tocar, que debe ser examinada por quienes quieren optar a hacer un informe del terreno antes de que se baraje el inicio de cualquier construcción.
La utilización del que fue construido como albergue constituyó la única salida a la que podía aferrarse la Ciudad para acoger a los MENA después de que Fiscalía ordenara el desalojo inmediato del centro ubicado en el Hacho. Durante años se había advertido de la mala situación en que se encontraba lo que era una residencia militar ocupada a finales de los años 90 para retirar a los menores de la calle. Así se llegó al extremo en el que, tras visitas del Defensor del Pueblo, no se pudo permitir por más tiempo la permanencia de los acogidos ordenándose su traslado urgente a otro lugar, ocupándose el albergue ya que disponía de módulos y servicios para dar una acogida urgente e inmediata. Lo que se presentó como una decisión temporal ha pasado a ser más permanente de lo debido, hasta que ahora la Ciudad ya ha dado los primeros pasos para la puesta en marcha del que será la futura ‘Esperanza’ más integrada y ubicada en el monte para el desarrollo de actividades vinculadas a la naturaleza.
Un lugar para liberar otro
La construcción del nuevo centro de menores es objetivo prioritario para la Ciudad, ya que lleva años arrastrando una asignatura pendiente. Urge además habilitar otro centro porque hay que dejar libre el actual de Hadú, que tiene como finalidad servir de sede a la Jefatura Superior si no hay nuevos cambios de plan. En estos momentos el Gobierno local está realizando obras en ‘La Esperanza’, que acoge a casi 200 menores no acompañados, la amplia mayoría de origen marroquí y entre ellos muchos pequeños.