El arquitecto portugués redactor del proyecto visitó las obras para comprobar su evolución y resaltó que todo avanza según lo previsto. Hoy se reunirá con el presidente de la Ciudad para departir sobre el proyecto.
La visita del arquitecto luso Álvaro Siza a nuestra ciudad marca un nuevo avance en el proyecto del conjunto monumental de la Manzana del Revellín. Siza, acompañado del también arquitecto Avelino Silva, y de los responsables de la obra, recorrió las instalaciones que en un futuro no muy lejano albergará el Auditorio. Aunque el redactor del proyecto no se ha atrevido a aventurar la fecha de finalización del mismo, las previsiones estiman en un plazo de seis meses la culminación del proyecto, según apuntaban desde la dirección facultativa.
Durante el recorrido de la obra, concretamente en el Auditorio, Siza tuvo la oportunidad de comprobar el desarrollo de la misma, y pese a algunas pequeñas modificaciones se mostró satisfecho del resultado. “La obra va bien y todo avanza como estaba previsto”, aseguró.
El arquitecto también pudo supervisar parte del mobiliario del Auditorio, las nuevas sillas que compondrán el aforo de 615 plazas, de las cuales un 20%, aproximadamente 120, se reservarán a los palcos.
El edificio del Auditorio, que tiene un altura de siete pisos, se empleará tanto para eventos culturales como para posible escenario de congresos, dispone de dos cabinas que pueden ser empleadas como zona de traductores en convenciones de carácter internacional o incluso como palco privado en caso de ser necesario.
A ambos lados del escenario se han habilitado dos torres de cajas escénicas, que incluye la instalación de la iluminación y del resto de elementos necesarios para el desarrollo escénico.
En la planta baja se ha habilitado un ambigú y zona de descanso entre actuación y actuación, que puede convertirse también en punto de encuentro entre el público y los actores. En esta misma planta también se habilita el almacén del teatro y varias zonas de servicio.
El proyecto escénico lo desarrolla la empresa Chentrol, subcontrata de Corsán-Corviám a la que fue adjudicada la obra de la Manzana del Revellín. Chentrol, una de las entidades con mayor prestigio en su campo, viene avalada por proyectos como el Teatro de la Maestranza de Sevilla, la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia y el Palacio de Congresos y de la Música de Euskalduna, en Bilbao.
Por otra parte, el Auditorio incluye dos accesos directos al escenario, habilitados especialmente para introducir decorados, elementos de iluminación y todos aquellos necesarios para la puesta en escena de un espectáculo. Recientemente, el proyecto ha sufrido una pequeña modificación al añadir un nuevo ascensor habilitado para discapacitados que permita el acceso hasta el propio escenario, ya que, con anterioridad, únicamente se disponía de un único elevador además del montacargas para el traslado de materiales.
Siza se reunirá hoy con el presidente de la Ciudad, Juan Vivas, y con los consejeros de Economía, Guillermo Martínez; Hacienda, Francisco Márquez; y Fomento, Juan Manuel Doncel para analizar el desarrollo del proyecto.
Una fuente coronará el centro de la plaza de la Manzana
Proyecto de última hora
El complejo del arquitecto portugués Álvaro Siza se distribuye en torno a una plaza en la que se ubicará una fuente, un elemento que, aunque en un principio no estaba previsto en el proyecto inicial, se ha planteado como una de las modificaciones para esta zona común a todos los edificios.
Al margen de esto, se colocará el mobiliario urbano correspondiente a una plaza de estas características, como bancos o parterres.
Por otra parte, aún no se ha concretado la utilidad que se dará a los dos edificios privados, de titularidad de la asociación Manzana del Revellín.
Prevención de incendios
Cortafuegos en el escenario
Las medidas de prevención de incendios es uno de los aspectos más cuidados, en el conjunto de la Manzana del Revellín, y especialmente en el Auditorio. En este edificio, dichas medidas se centran en el telón cortafuegos que se coloca verticalmente frente al escenario, y que se activaría, en caso de producirse un fuego, aislando el escenario del resto del auditorio, evitando así su extensión por la zona, a fin de posibilitar la evacuación del público.
Precisamente, el 90% de los fuegos se inicia en esta zona del escenario y, en caso de producirse uno el telón bajaría de inmediato y se activaría una cortina de agua.
El sistema está soportado por varias poleas situadas a más de 20 metros de altura por encima del escenario. Sobre esta caja escénica, además, se han habilitado seis exutorios o aperturas para la extracción del humo provocado por un incendio que pudiera producirse en la planta inferior.
El aparcamiento abrió sus puertas en diciembre
El aparcamiento de la Manzana del Revellín fue la primera de las dependencias culminadas e inauguradas recientemente. Tiene capacidad para 185 plazas y su superficie acapara los 4.300 metros cuadrados.
Su acceso tiene lugar a través de la entrada ubicada junto al Ceuta Center, además de disponer de otras cinco entradas peatonales: junto a la rampa del mismo edificio, en la zona trasera al Museo del Revellín, calle Ingenieros, junto al Auditorio y, finalmente, a través de la plaza interior del complejo de la Manzana del Revellín.
El aparcamiento abrió sus puertas al público el pasado mes de diciembre ofreciendo gratuidad a los usuarios durante todas las fiestas navideñas.
Materiales empleados
Tuberías
Las tuberías son de acero inoxidable y no de cobre o plástico, materiales normalmente empleados.
Hormigón
La obra ha empleado 18.000 metros cúbicos, el equivalente a 2.250 camiones.
Granito
La cantidad utilizada asciende a 1.500 toneladas.
Hierro
Han sido empleados 3 millones de kilos de hierro.
Cable eléctrico
Siete kilómetros de cable eléctrico recorren las instalaciones.
Tierra
La tierra extraída asciende a 89 toneladas.
La Ciudad recepcionará el Conservatorio de Música esta semana
Aulas con aislamiento de última generación
La Ciudad recepcionará esta semana el Conservatorio Municipal de Música, trámite que, aunque estaba previsto llevarse a cabo durante la última visita del número dos del despacho de arquitectura de Siza, Avelino Silva, finalmente hubo de posponerse debido a que el traslado fue imposible por la nube volcánica que asoló toda Europa suspendiendo innumerables vuelos e impidiendo los traslados, tal fue el caso del arquitecto portugués.
El Conservatorio se encuentra prácticamente amueblado, quedando únicamente por concretar los últimos detalles del edificio. En un principio, la recepción será con carácter provisional, tal y como establecen los trámites a seguir, y finalmente, una vez que ya se culmine todo el proceso de equipamiento se procederá a la recepción definitiva.
El nuevo Conservatorio de Música se distribuye en dos edificios anexos con tres plantas cada uno de ellos. El primero de los inmuebles acoge dos aulas de coro y ocho más para impartir clases, repartidos en dos de los pisos, además de los correspondientes aseos, (algunos de ellos habilitados para discapacitados), una sala de profesores y un claustro. El edificio está coronado por una terraza impermeabilizada y solada con mármol, desde la que se puede apreciar el conjunto total del complejo de Álvaro Siza.
El segundo edificio, destinado a clases especializadas, consta de cuatro despachos de administración en la planta baja, siete aulas más para impartir clases en los dos siguientes pisos y otras doce, en la última planta, destinadas a la enseñanza especializada. Ahí se han habilitado aulas más reducidas para alumnos que se encuentren en un nivel más avanzado y requieran de la realización de prácticas individuales.
Los dos edificios que componen el Conservatorio Municipal de Música tienen suelos de madera y las paredes de los pasillos van cubiertos de mármol. Además, en cada uno de ellos se instalará un ascensor para cumplir la normativa de accesibilidad.
El Conservatorio dispone de un aislamiento acústico de última generación que se ha aplicado a todas las aulas, tanto en suelo como en paredes, para no interferir en el normal desarrollo de las clases. Incluso el techo contará con este aislamiento sintético para crear las condiciones acústicas adecuadas y aislarlo del exterior.