El desgaste, las críticas internas y las también externas -publicitadas a través de AUGC y UFP- han terminado por tener su efecto. Y es que desde hoy está previsto que la UIP del Cuerpo Nacional de Policía se haga cargo de la vigilancia del entorno del barrio, con lo que se daría orden tanto a UPR como a Benemérita de abandonar los puestos.
El hecho es que varias unidades desplazadas de la península llegaron ayer a la ciudad y, ya de noche, tomaron el pulso al barrio para, hoy, comenzar a organizar los controles. Así las cosas la UIP asume el control para evitar el tráfico de drogas y, sobre todo, de armas mientras que se devuelve, o al menos es lo que se pretende, la normalidad a la organización de las demás fuerzas, en especial la Benemérita que se encontraba completamente presionada.
La llegada de la UIP se produce poco después de la queja formal presentada por el secretario nacional de Acción Sindical de la UFP ante la dirección general de la Policía y la dirección de la comisaría general de Seguridad Ciudadana, en la que se denunciaba la irregular utilización de la UPR. Así, y después de que el Consejo de la Policía diera la razón al sindicato en su crítica de los turnos obligados por la Jefatura Superior -tal y como publicó este medio-, la UFP había cargado todas las tintas contra este modo de organización policial. El sindicato advertía además del fallo que se estaba teniendo en cuanto al uso dado por los mandos de la UPR, dándole funciones para las que ni está especializada ni debe acometer, más aún en situaciones de alarma social como la generada con los continuos tiroteos. “La provisionalidad de la norma en la que están recogidas las funciones de la UPR y la generalidad de los servicios que puede realizar esta unidad han dado lugar a una serie de abusos en algunas plantillas por parte de responsables policiales, utilizando la UPR para todo y sin horarios definidos. Hay que tener en cuenta la importancia que tiene para cualquier trabajador conocer qué trabajo va a hacer y en qué condiciones, con una antelación debida”, concretaba el sindicato en su queja. “De forma excepcional y en respuesta a una alteración de la seguridad ciudadana se puede solicitar a los trabajadores que alteren su jornada” más si cabe cuando “los horarios están contemplados en la circular del subdirector general operativo”, sentencia. Todas estas normas se habían saltado a la torera en el caso de Ceuta.
Por su parte AUGC estaba preparando la denuncia por la irregularidad cometida con estos controles. Primero por no cumplirse los requisitos; segundo por el desvío de agentes que se quitan de otras unidades de por sí deficitarias con lo que provoca de empeoramiento de los servicios y, tercero, porque ya estaban siendo demasiadas las jornadas en las que la Benemérita se estaba quedando sola en los controles, tal y como se pudo apreciar en la jornada electoral del 20-N. La asunción del control del barrio por la UIP se llevará a cabo de manera gradual y desde ya.
“La UPR carece de agentes para cubrir los servicios que están ordenando”
La Secretaría Nacional de Acción Sindical de la UFP había advertido de la mala praxis adoptada por la Jefatura Superior con la unidad UPR al ordenársele los controles de la parte superior de la barriada. “La UPR carece de funcionarios para cubrir un volumen tan amplio de servicios, con la cobertura de servicios patrulla, conducciones a la península -que conlleva tres días fuera de la localidad-, con 10 funcionarios por cada viaje, servicios de fútbol el fin de semana, servicio de orden público en las zonas de ocio, además de los puntos negros. Esto ha generado que se establezca un cuadrante operativo tan amplio que además en muchas ocasiones termina siendo ampliado y modificado con una antelación mínima que impide a los funcionarios conciliar la vida familiar y laboral”, espeta el sindicalista. Los agentes de esta unidad llegaron a tener hasta tres cambios de horarios en una sola tarde, dada la imprevisión de las órdenes de control dadas. Llegaron a plasmarse turnos de hasta diez horas seguidas y en horarios imposibles de compatibilizar.