Las barriadas de Los Rosales -primero- y Príncipe Alfonso -después- fueron literalmente tomadas en la mañana de ayer en la denominada ‘Operación Reto’, en el que participaron más de cien agentes de la Policía Nacional además de unos sesenta de la Policía Local.
Se trataba de blindar policialmente la reconstrucción judicial de cómo se supone que se produjo el asesinato de Karim Mohamed, el 24 de julio de 2011, en plena barriada del Príncipe Alfonso. Una reconstrucción que debía servir para que las partes se hicieran una idea de cómo pudieron suceder aquellos hechos, ya que, a fecha de hoy, se manejan muchísimas teorías en cuanto a la posible participación de unos u otros e, incluso, a que ninguno de los que está preso tuviera algo que ver con lo que sucedió.
A las 8.30 horas estaban citados en el Palacio de Justicia los abogados y distintos actores judiciales, concretándose que el inicio de la reconstrucción fuera en la barriada de Los Rosales, concretamente en el llamado ‘Callejón de la Nena’. Ya desde primera hora de la mañana sus inmediaciones estaban vigiladas por la Policía Nacional, que desplegó a agentes de la UPR, de la UIP y de los GOES (Grupo Operativo Especial de Seguridad) con base en Málaga. Estos estaban a pie de campo y desde las alturas un helicóptero del Cuerpo Nacional de Policía reforzando la vigilancia. Los agentes de la UIR, de Tráfico y de Seguridad Ciudadana de la Local colaboraban en las funciones dirigidas por la Nacional. Agentes de la UDYCO, que llevaron a cabo esta investigación así como de la Científica, también participaron grabándose en todo momento cada uno de los pasos que se iban dando.
Pasadas las 9.15 comenzaba la reconstrucción a pie de campo. Los detenidos, que habían sido trasladados inicialmente por la Guardia Civil en un furgón, salieron controlados por los GOES de la prisión de Los Rosales. En los callejones cercanos se posicionaban algunos familiares que, sabedores de que iba a realizarse la reconstrucción, se habían apostado cerca del dispositivo para ver a los detenidos. Al estar presos en cárceles peninsulares, algunos de los familiares más directos llevan meses sin ver a los imputados por su presunta participación en la muerte del miembro de las Brigadas Cívicas. Algunos pretendían incluso acercarles ropa, tarea imposible, otros, sin más, sólo querían verlos. La Policía dispuso un cordón de prevención evitando que, salvo los periodistas allí presentes, nadie se acercara hasta los imputados.
Los cuatro detenidos, M.L., ‘Pajarito’; A.M., ‘Abdelmunin’; I.K. ‘Grana’ y H.M., fueron trasladados al citado callejón en donde se supone, según las tesis policiales, que se habría organizado la subida a la barriada del Príncipe para cometer el crimen. Dicho trayecto se habría llevado a cabo en un vehículo modelo Fiat para, una vez practicado el ataque mortal a Karim, bajar en un Honda Accord.
Todo esto son hipótesis de trabajo, teorías que forman parte del proceso judicial seguido en el juzgado número 5, ya que sobre los cuatro detenidos sigue pesando la presunción de inocencia, que es la que intentan hacer valer sus respectivos letrados, ayer presentes en esta reconstrucción.
Sobre el terreno y durante una hora y media, su señoría recorrió con todos los abogados los diferentes escenarios posibles dibujando un croquis virtual sobre lo sucedido aquel 24 de julio. Del ‘Callejón de la Nena’ se pasó a la barriada del Príncipe haciendo dos posibles recorridos, bien por las escaleras y la plaza que conduce a la calle peatonal o bien por el garaje. Y es que este segundo episodio no está nada claro. Caben ambas posibilidades, que los pistoleros que terminaron con la vida de Karim Mohamed cruzaran a pie la plaza o que lo hicieran entrando en el subterráneo y saliendo por la puerta que da a la calle peatonal en donde se le sorprendió a tiros. La puerta de dicho garaje está soldada ya que después de lo ocurrido los vecinos decidieron anularla, por lo que sólo queda hoy por hoy una puerta de acceso peatonal operativa.
Ya sobre las 10.15 horas los detenidos eran trasladados al Príncipe, en donde se siguió la reconstrucción de lo que allí pasaría. Sobre este escenario vuelven a aparecer múltiples versiones: hay quienes denuncian que ‘Pajarito’, ‘Grana’ y ‘Abdelmunin’ habrían salido de este lugar armados mientras que otros cambian el papel de los actores situando solo a alguno de ellos en este escenario.
Encabezados por el juez titular del juzgado de instrucción número 5, la comitiva de abogados de las distintas partes y de la Acusación comprobaron en escena las hipótesis que se manejan en torno a este caso. De hecho con la reconstrucción de ayer ayudó a hacerse una idea de si eran posibles algunas de las teorías que se manejan. Por ejemplo, hay testigos que han indicado que vieron a los presuntos implicados desde la altura de la Farmacia, así que la comitiva judicial se desplazó hasta la botica para comprobar si desde allí se podía ver perfectamente e identificar a los autores. ¿Resultado? Para algunos resultaba imposible. Se quería ver, in situ, si es posible, desde la otra punta, ver a las personas que, a la carrera, habrían salido del garaje para matar a Karim. También parecía tarea complicada. Tras llevar a la práctica varios recorridos siguiendo las narraciones que hacen los testigos que figuran en la causa, algunos en calidad de protegidos, se escenificaron los disparos y la huida con los vehículos. Así, un agente, arma en mano, efectuó tres disparos para simular lo que aquel día pasó y después se cronometró la huida por dos caminos distintos, uno largo y otro corto, para cuadrar como pudo ser la escapada de los implicados aquella tarde desde el barrio hasta, de nuevo, el ‘Callejón de la Nena’. En una de las pruebas se invirtió cuatro minutos y en otra, dos. En torno a las once finalizó la reconstrucción.
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