El problema es gordo, por ser serio, y tiene que ver con el sobrepeso y el sedentarismo. Esa es una de las principales conclusiones que se desprende de las IV Jornadas sobre Factores de Riesgo Cardiovascular: siete de cada diez ceutíes que acudieron a someterse a las pruebas padecen sobrepeso u obesidad, “pacientes con riesgo alto de padecer un accidente cardiovasculares”.
Las jornadas tuvieron lugar en el Centro de Salud Otero el pasado 31 de mayo y tenían como objetivo pulsar el estado de la salud cardiovascular de los ciudadanos. Juan Carlos Mata, médico de Atención Primaria de Otero y coordinador de la campaña preventiva y diagnóstica, valoró el número de pacientes, 155 (70 hombres y 85 mujeres), que se prestaron voluntariamente a la realización de las pruebas. “Es importante que la mitad de ellos tuvieran entre 40 y 60 años. Era el grupo de edad que pretendíamos examinar”.
El estudio del peso fue prioritario. Es uno de los factores de riesgo que más incide en la aparición de enfermedades cardiovasculares. El 70,91% de los pacientes presentó sobrepeso u obesidad (distribuidos en un 37,4%, los primeros, y un 33,5 los obesos). La medición del perímetro abdominal de los pacientes arrojó igualmente unos datos reveladores: algo más de la mitad de los hombres (51,4%) superó el umbral -102 cm.-. En el caso de las mujeres el registro fue aún mayor: el 63,2% de las mujeres presentó un perímetro abdominal superior al saludablemente establecido (88cm.).
“Son datos preocupantes”, señaló Mata. “La indicación, a tenor de la medición del peso, es que un 70% de los pacientes que se hicieron las pruebas tiene un alto riesgo de padecer un accidente cardiovascular. Esto, unido a que cuatro de cada diez reconocen tener una vida sedentaria, nos hace meditar sobre la importancia de tratar en profundidad este tema. Deberíamos insistir en la importancia de la modificación de los hábitos de vida en cuanto a dieta y actividad física”, dijo.
Respecto a los fumadores, dos de cada tres que acudieron a la prueba tenían un consumo de cigarrillos de 20 unidades o menos al día. “Eso indica una dependencia moderada a la nicotina y, por tanto, con muy buenas expectativas para introducirlos en Programas de deshabituación tabáquica”, explicó Mata.
El 25% de los participantes tiene un riesgo cardiovascular mayor o igual a 5%, según el método de estudio 'Score'. “Debemos tomar medidas en los aspectos de educación sanitaria, importancia del cumplimiento terapéutico y un seguimiento estrecho de los pacientes”.