Una corta edad no tiene por qué ser una limitación para sacar adelante grandes ideas. Prueba de ello puede encontrarse mismamente aquí, en Ceuta. Concretamente, en una de las aulas de sexto curso del colegio Príncipe Felipe. La joven ceutí Manal Mohamed se ha atrevido con la programación y no solo se ha postulado como una de las 83 solicitudes enviadas al concurso nacional de programación que, como cada año, se celebra en todo el país. Mucho más que eso: Manal se ha convertido en una de las premiadas en la categoría para estudiantes de Primaria.
En esta edición, la temática giraba en torno a uno de los géneros más conocidos, ligado a uno de sus autores estelares. 'Asimov y la ciencia ficción' ha sido el foco elegido para que los aspirantes realizasen un proyecto sobre el tema recurriendo al 'Scratch', un lenguaje de programación para amateurs que permite visualizar ideas de manera creativa incluso para aquellos que no cuentan con conocimientos previos sobre estos códigos.
'¿Quieres ser Asimov?', el proyecto premiado
La ceutí Manal Mohamed aceptó este reto y desarrolló su propia idea de ciencia ficción, que tendría por nombre '¿Quieres ser Asimov?'. El director del centro 'Príncipe Felipe', David Ugarte, ha explicado que ya que se estaba trabajando en aquel momento en las características de la biografía, decidieron aprovechar el lanzamiento de este certamen para poner en práctica la materia y trabajar, así, la biografía de Asimov. Uno de los autores de ciencia ficción más reconocidos en el mundo entero y creador de obras tan icónicas del género como 'Yo, robot' y que ahora pasarían a ser tratados por esta joven de Ceuta mediante el lenguaje visual y las opciones comunicativas del Scratch.
Desde la organización del concurso han querido, además, agradecer que hayan habido solicitudes de "prácticamente todas las Comunidades Autónomas" a pesar de las circunstancias "tan complicadas" de este curso académico. Indican que se han presentado proyectos "realmente interesantes, trabajados, originales e imaginativos, sorprendiendo al propio jurado y poniéndole las cosas muy difíciles a la hora de determinar quiénes se llevarían los premios". Uno de ellos, finalmente, terminó en las manos del colegio público de Ceuta gracias a la creatividad de una alumna de 'ciencia ficción'.