El pasado fin de semana, el encuentro entre el Sporting Atlético de Ceuta y el Sima Granada FS de la Copa del Rey fue suspendido por los árbitros por incidentes con una parte del público que asistió a ver el encuentro al Complejo Deportivo Guillermo Molina.
Ahora, el Juez de Competición de la Real Federación Española de Fútbol ha dictado una doble sanción para el conjunto ceutí: le ha dado el partido por perdido por un contundente 0-6 –iba 3-4 cuando fue suspendido- y además le ha sancionado con una multa económica de 300 euros.
Los incidentes, y así lo reflejaron los granadinos, se debió a un grupo de espectadores, concretamente algunos que estaban colocados encima del banquillo visitante, y empezaron a verter diferentes amenazas, así como lanzaron una botella que estuvo a punto de impactar en el entrenador del conjunto granadino. Ese fue el extremo a que los árbitros tomaran la decisión drástica de suspender el encuentro a falta de 4 minutos para que terminara el partido.
Eso llevó a que los dos equipos emitieran sendos comunicados: los granadinos condenando los hechos, mientras que los ceutíes iba al mismo respecto pero como señal de respeto a la competición de la Copa del Rey esperaba que se pueda concluir el partido, en las mismas condiciones de cuando dio comienzo.
Eso sí, el Sporting se preguntaba en el comunicado sobre el supuesto intento de agresión con “El Sima Granada FS, denuncia la agresión con una botella a su entrenador, cuando se dirigía a la mesa arbitral ¿Por qué tal aspecto no se recoge en el acta arbitral? ¿Por qué no hubo intervención médica en ese momento?”.
En definitiva, el Juez Único ha tomado la decisión más dura que podía tomar al respecto y le deja al equipo ceutí sin la oportunidad de igualar el encuentro a falta de 4 minutos y de un posible pase de ronda.