La Feria de Ceuta hay que vivirla, pero también recordarla. Y qué mejor forma que a través de una fotografía. Cada foto tiene detrás una historia, detalles importantes para comprender y recordar los mejores momentos vividos. Inmortalizar ocasiones es uno de los oficios más antiguos y Juan Conde lo sabe bien. Lleva desde los 17 años mirando desde el otro lado del objetivo las sonrisas de los niños y adultos que ataviados con sus trajes de lunares y sus mejores galas posan felices para recordar la Feria.
Han pasado décadas desde que tomó sus primeras fotos con una cámara y hoy afirma que esta es su compañera fiel, además de su forma de ganarse la vida. En el ferial, sobre todo en la entrada, todos lo buscan, todos quieren tener su foto de recuerdo.
Con sus trajes de gitanos y de gitanas, los niños y niñas posan para Conde con su mejor sonrisa. Como el propio feriante reconoce, tiene su clientela fija que aparece cada año, sin falta, para tener la instantánea. No le falta detalle: una mesa y una silla al más puro estilo de un patio andaluz, y, por supuesto, una guitarra para salir de las mejor de las maneras.
Pero no es oro todo lo que reluce. Y es que puede ser el último año que Conde visite la Feria de nuestra ciudad. Son más de 60 años haciendo fotografías, un oficio que no heredarán sus hijos. Además, la edad y el alto coste de venir a Ceuta también hacen mella y le hará replantearse si merece la pena, aunque reconoce que echará de menos a los ceutíes que siempre lo han tratado como un caballa más.
Por último, Juan agradece a todas las personas que han procurado su negocio durante tantos años, pues han sido los protagonistas en cada una de las fotos que ha tomado.
Su historia es como la de muchos feriantes, siempre de feria en feria, visitando ciudades como sustento de vida. Personas que te atienden cada noche con una sonrisa y que solo se merecen tener suerte y que su negocio sea rentable en cada Feria que visite. Pero, lo que aún hace sonreír a este linense es que aún le quedan otras cinco noches de feria aún por vivir.